Marruecos ha admitido por fin que dispara contra los inmigrantes, tras
morir seis subsaharianos en la última avalancha en Melilla. Mientras Rabat hacía este anuncio, Alonso explicaba en el Congreso, frente a las
dudas de Zapatero, que los disparos del jueves en Ceuta
no los realizó la Guardia Civil. También anunció que expulsará a 70 inmigrantes sin explicar, como le pidió el diputado del PP
Francisco Antonio González, con qué criterios se seleccionarán. González denunció que
Zapatero mintió al achacar las vallas al PP. Mientras,
Imbroda dice que los melillenses tienen
ganas de ver al Rey.