La comparecencia del presidente del Gobierno estaba programada para informar de la participación de España en Afganistán, donde murieron 17 militares españoles, y para dar cuenta de la cumbre de la ONU. Zapatero comenzó por lo segundo hasta llegar al anuncio sorpresa: en los Presupuestos habrá una partida de 656 millones de euros en ayuda al desarrollo. La tragedia de los helicópteros pasó a segundo plano.
Mariano Rajoy se lo recordó y le acusó de "ocultar la verdad".
Hasta Manuel Marín elogió el "espléndido
discurso" del líder popular. El enfrentamiento real llegó
en las réplicas.