Junto a la entrada de Codorníu están las bodegas Raventós, con un impresionante árbol que recuerda al logo de la firma
Lo primero que conocemos es el edificio de recepción de las bodegas, una bellísima nave con cierto aire a iglesia
La casa de los Codorníu, también obra de Josep Puig i Cadafalch
Vista del Museo
Algunas de las viejas máquinarias usadas en la elaboración del cava
Naves en las que reposaba el mosto de uva
Las grandes salas en las que se acumulaban las barricas
Unas hileras de barricas que hoy en día ya sólo sirven como ejemplo y adorno
Enormes depósitos usados en otro tiempo
Un operario controla la llegada del primer mosto de la temporada
Escalera que nos lleva a algunas de las cavas subterráneas, que tienen nombre de grandes ciudades
Apiladas en la oscuridad de la cava, las botellas se llenan de polvo
Las cavas más antiguas tienen un sabor muy especial
Parte del recorrido por las enormes cavas (200.000 metros cuadrados) se realiza en un pequeño trenecillo
En la parte más antigua de la cava se guarda, convertida en una peculiar lámpara, la primera viña de Codorníu
Uno de los viñedos junto a las bodegas Codorníu
Ciudadas uvas del Penedés, acercándose a su punto idóneo de maduración
Otro de los hermosos viñedos de la zona