El FMI alerta sobre los riesgos de una nueva recesión mundial debido al sobrecoste en las obras de una rotonda en la calle Piqueras de Logroño.

El carril de fuera de la rotonda ha salido un 10% más
caro de lo previsto porque era más largo que los de
dentro. Monti y Merkel están indignados por este
nuevo desajuste en las cuentas de España. El euro
está cayendo en picado y los bancos españoles
necesitarán nuevas ayudas públicas para superar este
nuevo varapalo.

No creo que llegue a tanto.

Goldman Sachs casi lo consigue en 2008, pero ni por esas.

De Lehman Brothers ni le cuento, y tampoco lo consiguió.

Claro que Rajoy es gallego y cualquier cosa se puede esperar.

Pero, reconozca conmigo, que como las ventosidades de Camilo José Cela, ningunas.