Así era la doble presa del Poyo y Pozalet que habría salvado vidas y frustró el bloqueo de Zapatero al Plan Hidrológico
Si Zapatero no hubiera renunciado al Plan Hidrológico Nacional en 2004, las muertes causadas por la DANA en Valencia podrían haberse reducido.
La documentación aún se encuentra alojada en los históricos del Gobierno de España. Allí figura bajo el siguiente epígrafe: "El Gobierno anuncia la creación de una presa en Cheste para evitar riadas en 16 pueblos". La fecha, 3 de julio de 2004. Es decir, que muy posiblemente, habría estado construido a estas alturas. Entre las 16 localidades estaban, por cierto, Paiporta, Catarroja o Picanya o Massanassa.
"La Confederación del Júcar prevé actuaciones en los barrancos del Pozalet, la Saleta y el Poyo", señalaba aquella información. "Cerca de una veintena de municipios ya no mirarán al cielo con temor cuando lleguen las tormentas", añadía recogiendo un comentario de la prensa regional. "El Gobierno anunció ayer el plan contra riadas para 16 municipios que incluye la creación de una presa en Cheste. La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) presentó ayer a 16 ayuntamientos y grupos ecologistas el plan contra avenidas de la cuenca de la rambla del Poyo", explicaba.
La comarca de l’Horta sud ha sido históricamente una de las más castigadas por las grandes inundaciones en temporadas de gota fría y poblaciones enteras han visto, año tras año, "como el agua del barranco del Poyo se ha desbordado llegando a anegar bajos, viviendas y causar serios desperfectos en vehículos e inmuebles", señalaba igualmente. Las localidades de la lista eran las siguientes: "Alaquàs, Aldaia, Catarroja, Cheste, Xirivella, Godelleta, Massanassa, Paiporta, Picanya, Ribarroja, Torrent, Quart de Poblet, Loriguilla, Mislata y Valencia", algunas de las cuales forman hoy parte de una historia triste y letal.
La primera de las actuaciones pasaba por "la creación de una presa en Cheste". Y la propuesta tenía como objetivo regular "los caudales procedentes de la cuenca alta de los barrancos del Poyo y del Pozalet". El plan incluía dos diques de contención de agua: "La infraestructura prevista incluye la construcción de otros dos diques –uno en cada barranco– que desaguarían en el cauce del Poyo para reducir el caudal de agua en ambos casos por el efecto de laminación del propio embalse".
La presa de Cheste estaba diseñada con una capacidad, según los cálculos de la Confederación Hidrográfica del Júcar -la misma que ahora el Ministerio de Teresa Ribera asegura que no tiene competencias en barrancos- "de unos ocho hectómetros cúbicos". El plan incluía la adecuación del barranco desde su cruce con el by-pass.
La actuación también preveía la creación de "una gran vía verde de unos 30 metros de ancho que termina en un parque que actuará como laguna de acumulación en casos de avenidas". "El corredor verde quedaría integrado paisajísticamente en el entorno, minimizando así el impacto ambiental", detallaba el plan en cuestión. "El desvío de la Saleta ha sido una de las principales reivindicaciones del Ayuntamiento de Aldaia. Esta población se encuentra bajo la influencia de los barrancos del Poyo, Gallego y Pozalet. La última gran riada se vivió en octubre de 2000", señalaba por aquellas fechas la explicación el plan.
La presidenta en aquellas fechas de la mancomunidad de l’ Horta Sud, Empar Navarro, destacó lo siguiente sobre el proyecto: "Dará una solución global respetando las realidades locales y preserva el parque natural de la Albufera de aterramientos". El primer teniente de alcalde de Cheste, Antonio Montaner, manifestó: "Además de solucionar las riadas podremos aprovechar el agua embalsada". El plan se paró al renunciar José Luis Rodríguez Zapatero al Plan Hidrológico Nacional que, por cierto, lo financiaba la UE.
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