Todas las crisis son una oportunidad y más si las origina su rival. El PSOE contempla el suicidio de Pablo Casado como la ocasión perfecta para promocionar a su nuevo líder en Madrid, Juan Lobato, un desconocido elegido hace apenas cuatro meses tras un proceso de primarias. Se trata de un técnico de Hacienda que hasta este momento había ejercido como alcalde de Soto del Real.
Hasta ahora, su flamante puesto en la Asamblea de Madrid, como portavoz, había pasado discreto. Hasta que llegó la crisis del PP y las acusaciones del líder del partido contra Isabel Díaz Ayuso por los contratos de su hermano. Desde ese momento, Ferraz le ha colocado como el portavoz del partido ante el escándalo mientras la dirección federal opta por un perfil bajo.
En un primer momento, el jueves, compareció en los pasillos del Congreso el portavoz de la Ejecutiva, Felipe Sicilia, arremetiendo contra Pablo Casado pero sin olvidar a la presidenta madrileña. "El PP de Casado sigue con las mismas prácticas corruptas del PP de Rajoy y Aznar. El mismo PP haciendo lo mismo y de la misma forma", añadía. Fue la única intervención de la dirección federal que, desde ese momento, han optado por la prudencia y el silencio.
Este lunes no habrá rueda de la prensa desde Ferraz. A cambio, la dirección ofrecerá unas declaraciones de Juan Lobato desde Aranjuez. En el PSOE son conscientes de la oportunidad que se abre para dar a conocer a su candidato. El tiempo apremia y dentro de un año son las elecciones autonómicas en las que Lobato se enfrentará a Ayuso.
Contra Ayuso
Conforme han ido pasando los días, el PSOE ha ido perfeccionando el tiro. Conscientes del desgaste de Casado, al que le podría quedar poco al frente del partido, Juan Lobato se ha centrado en la que será su rival: Isabel Díaz Ayuso. El nuevo líder de los socialistas madrileños se ha prodigado en entrevistas y actos públicos.
Este domingo, en el congreso de las Juventudes Socialistas de Madrid, Lobato prometía un partido "serio y honesto" mientras aseguraba afligido que sabía "cómo se sienten" los exvotantes del PP "que volvieron pensando que era un PP nuevo" .
La ofensiva contra Ayuso es total. Además de declaraciones, Lobato también se ha presentado ante la Fiscalía, junto a Más Madrid, para llevar más supuestos contratos del hermano. Los socialistas buscan un calendario judicial adverso para Ayuso que se podría prolongar durante este año y el siguiente, afectándole durante las elecciones autonómicas.
Al calendario judicial, se sumaría el desgaste parlamentario. El PSOE también pedirá una comisión de investigación en la Asamblea de Madrid sobre los contratos del hermano de la presidenta autonómica. No es la primera vez que se aprovechan de los dosieres de Génova contra Ayuso. El pasado 11 de noviembre, la diputada socialista en la Asamblea, Carmen López, reprochó a la presidenta regional los supuestos contratos de su hermano. Por primera vez en un pleno, se atacaba a Isabel Díaz Ayuso con la información elaborada presuntamente por los espías contratados por fontaneros de la dirección nacional del PP para destruir a la presidenta madrileña. Unos días más tarde, reconocía que no tenía pruebas.
Contra Feijóo
El otro foco lo han puesto en el posible caballo blanco del PP: Alberto Núñez Feijóo. Este fin de semana, el secretario de organización del PSOE, Santos Cerdán, asistía a la clausura de congreso del PSOE de Lugo para acusar al presidente gallego de presentarse como "el salvador, el promotor que urgía a la dirección del PP y a Ayuso a llegar un pacto". "La corrupción no se pacta para callar, se denuncia, Feijóo", añadía Cerdán.
De momento, prudencia y a contemplar los hechos. No en vano, los socialistas saben lo que es una crisis interna como el comité federal del 1 de octubre de 2016 que acabó con la destitución de Pedro Sánchez. Tras un año de interinidad, se saldó con el retorno del secretario general tras arrasar en las primarias contra Susana Díaz, apoyada por el aparto. Tras una catarsis colectiva, el PSOE volvió al gobierno sólo unos meses más tarde vía moción de censura. Nadie como los socialistas para saber cómo son las crisis internas y lo fácil que pueden resucitar unas siglas si se ilusiona a las bases.