La convocatoria de elecciones en Castilla y León no ha pillado al PSOE por sorpresa. Es lo que muchos dirigentes apostaban en privado desde hacía varias semanas y ya habían subrayado en color rojo esta semana como una de las "claves". Sin embargo, tanto el PSOE como el Gobierno han dejado claro que no les gusta nada este adelanto y lo vinculan con el calendario judicial que, a partir de primavera, podría afectar al PP de Castilla y León.
La ministra de Justicia, Pilar Llop, era la primera en salir para acusar a Alfonso Fernández Mañueco de intereses ocultos: "Generar unas elecciones anticipadas que impidiera que coincidiera con la resolución de esas causas judiciales". La titular de Justicia del Ejecutivo de Pedro Sánchez reiteraba que "hay que tener en cuenta que algunas personas responsables políticos del Gobierno de Castilla y León se enfrentan a causas judiciales muy importantes".
En esa línea ahondaba el portavoz de la Ejecutiva del PSOE, Felipe Sicilia, quien aseguraba que "han preferido adelantar elecciones antes que rendir cuentas a los ciudadanos por esas citas judiciales en la primavera del próximo año". "Mañueco está más preocupado de las citas judiciales que de las citas médicas que tienen los ciudadanos para hacer frente a la pandemia", añadía.
En el PSOE vinculan la premura de las elecciones anticipadas con el calendario judicial. El 14 de marzo comienza el juicio por el sobrecoste de un edificio conocido como "Perla Negra" y que sentará en el banquillo a la cúpula de la consejería de Economía durante los tiempos de Juan Vicente Herrera. Más próximo a Alfonso Fernández Mañueco es el "caso primarias" por unas anomalías en la votación interna en la que salió elegido candidato. En ese caso está imputado el actual presidente del PP de Salamanca. El PSOE insistirá en estos casos para tratar de repetir la primera posición que Luis Tudanca tuvo hace dos casos.
Irresponsable por convocar elecciones en pandemia
Lo que más ha indignado al PSOE es que Mañueco haya convocado las elecciones "en plena sexta ola". "Irresponsables", decía Llop. Desde Ferraz, Felipe Sicilia, reprochaba que cesasen a la consejera de Sanidad en plena escalada de casos. Cuando le preguntaban si no era lo mismo que hizo Salvador Illa, cuando dejó el Ministerio para ser candidato en Cataluña, el portavoz del PSOE lo desvinculaba porque "no dejó el puesto vacante. Y ganó las elecciones, por lo que no lo valorarían tan mal".
El PSOE también marca distancias con otros comicios que apoyaron, como fueron los de Madrid y Cataluña. Aseguran que en esas comunidades había "inestabilidad política" y que , en cambio, en Castilla y León se han buscado "excusas" como "un invento de supuesta moción de censura", para tapar que había "estabilidad".
Congresos multitudinarios en plena sexta ola
Mientras el PSOE arremete contra Mañueco por convocar elecciones "en plena sexta ola", el PSC ha celebrado este fin de semana un multitudinario congreso que ha finalizado con la presidenta balear, Francina Armengol, infectada y con Salvador Illa confinado por ser contacto estrecho. También la vicesecretaria general, Adriana Lastra, está confinada tras tener contacto con el presidente asturiano, Adrián Barbón, que ha sido hospitalizado con la cepa ómicron.
Los socialistas defienden que "son responsables" y que lo han hecho cumpliendo con "todos los protocolos sanitarios". "Hemos cumplido rigurosamente con todos los aforos permitidos", decía Sicilia quien lanzaba la pelota al tejado de Sanidad porque "tienen que ser las autoridades las que tienen que analizar de cómo va evolucionando la pandemia".
Sólo se creen al CIS
En Ferraz están eufóricos con el nuevo CIS de Tezanos, que asegura que el pacto de izquierdas se podría reeditar. Es la única encuesta que se ha conocido en las últimas semanas que apunta a esa posibilidad. Todas aseguran que la derecha consigue la mayoría o está al borde.
Sicilia aseguraba que "respetaba el resto de encuestas" pero que son más partidarios de creerse al CIS. "Por el número de encuestas que realiza y hay datos que no tienen ninguna subjetividad, son datos puros, como el de intención directa de voto", argumentaba Sicilia para justificar su preferencia por los sondeos de Tezanos.