El pasado 11 de noviembre, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, recibió en la Moncloa al director regional de la OMS, Hans Kluge. Se trata de un médico belga que ejerce este cargo en el organismo internacional desde 2019. Según el comunicado, distribuido por el Ministerio de Sanidad, Kluge elogió la "gestión ejemplar de España" frente al COVID y "también al presidente Sánchez por su liderazgo en la respuesta a la pandemia".
Veintiún días después, la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, reconocía que alertó sobre el COVID mucho antes que el resto de sus colegas, que lo "vio venir" tras la gravedad de lo ocurrido en Italia y que por eso elaboró una guía de protección sanitaria, presentada el 5-M. La respuesta del resto del Gobierno, según la vicepresidencia, fue era una de "alarmista".
Ahora, en el Ejecutivo se aferran a la nota de prensa con las declaraciones de Hans Kluge para evitar cualquier crítica sobre negligencias, incluidas posibles querellas. Fuentes del Gobierno, consultadas por LD, afirman que ante esos casos repetirán que "España es un modelo de gestión" y que actuó de acuerdo a los criterios de la ciencia". Un argumentario que se repetirá como nuevo mantra del Gobierno.
Defensa cerrada de la gestión
El argumentario oficial lo exhibían también las ministras que hoy comparecían ante los periodistas tras la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. La más enfática en defender la gestión del Gobierno era la portavoz, Isabel Rodríguez, pese a que no era ministra en los tiempos más negros de la pandemia. "Lo que hizo el Gobierno de España fue estar al frente . Yo quiero felicitar a los que estaban entonces", afirmaba Rodríguez antes de reconocer que España actuó "con determinación".
Lo decía ante una Yolanda Díaz que hoy reculaba y afirmaba que "estaba orgullosa" de la gestión de la pandemia, "La OMS ha puesto a España como ejemplo en la gestión de la vacunación de la pandemia. Esto es ahora y lo era en plena pandemia. Creo que hemos sido ejemplares en la gestión de la pandemia", añadía una ministra de Trabajo menos sonriente que en otras ocasiones.
La gira de la OMS
Las declaraciones que el Gobierno exhibe como prueba son de una gira de Hans Kluge por varios países. El 9 de noviembre estuvo en Madrid y el día 15 en Portugal, donde se reunió con la ministra de Sanidad lusa, Marta Temido.
Allí, reiteró las mismas declaraciones que había hecho en España pero cambiando de país y les elogió por la "efectividad en la gestión de la pandemia". En una entrevista con el diario luso Expresso aseguro que la clave del éxito portugués era "la resiliencia de las personas, el Servicio Nacional de Salud y el liderazgo político del Gobierno".
Unas palabras que volvió a repetir ayer en Atenas tras reunirse con el primer ministro, Mitsotakis. Allí, Hans Kluge aseguró que "Grecia fue pionera para la OMS porque había involucrado no solo al sistema de salud pública sino también al sector privado en la gestión de la pandemia". También elogió el "liderazgo" del primer ministro "es impresionante la rapidez con que se tomaron medidas bajo su liderazgo personal", según cuenta el diario Oema.
Unas declaraciones de cortesía, que va repitiendo de manera idéntica por varios países pero que, para el Gobierno, constituyen la prueba irrefutable de que España actuó con ejemplaridad.
Malestar en el Gobierno
En el Gobierno no ocultan su malestar con la polémica de Yolanda Díaz. Se aferran a un argumentario oficial y no permiten que salga se salga de él. El Ejecutivo cierra filas atacando al PP. "El único que falló entonces fue el señor Casado, que no tiene rastro de ser una persona de Estado. Le iría mucho mejor si en vez de estar hablando mal todo el día de nuestro país, se detuviera y no contradijera lo que es una conclusión definitiva de la OMS", aseguraba Rodríguez antes de añadir que "podemos presumir de haber hecho una buena gestión".
También Yolanda Díaz calificaba de "polémica artificial" y atacaba al PP por "haber tildado al Gobierno de alarmista ,entre las cosas más sugerentes que había dicho," cuando presentó su guía. "En su momento pidieron mi comparecencia y de la vicepresidenta, Carmen Calvo", añadía la ministra de Trabajo.