El número dos de Oriol Junqueras y presidente de la Generalidad, Pere Aragonès, ha defendido la continuidad de la mesa de diálogo con el Gobierno a pesar de las fuertes presiones de Junts per Catalunya (JxCat) y un importante sector del independentismo tras la detención el pasado jueves en Cerdeña del prófugo Carles Puigdemont. Aragonès ha dicho que "no le consta" que el Gobierno estuviera al tanto del arresto, ha calificado las denuncias de JxCat de "especulaciones" y ha hecho una firme defensa de las relaciones entre gobiernos.
Aragonès considera que la captura de Puigdemont no debe alterar el marco de diálogo y que si debe servir para algo es para que el Gobierno entienda que con los indultos no se ha acabado el problema. Así, el dirigente separatista ha pedido a su socio Sánchez más gestos y hechos para acabar con lo que el separatismo califica de "represión".
A juicio del segundo de ERC, la detención de Puigdemont manifiesta el "nuevo despropósito de la cúpula judicial del Estado español que está absolutamente alineada con unas tesis nacionalistas españolas". Además, se ha sumado a las tesis del Gobierno de atribuir las actuaciones contra el nacionalismo a un Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) "que no se renueva y que cada año que pasa sin renovarse afecta a la credibilidad del conjunto del sistema".
Aragonès ha pedido a Sánchez que dé "pasos para acabar con la represión. Ha habido un paso que fueron los indultos pero se deben dar más pasos". También ha declarado que la mesa (de diálogo) "se puede ver afectada por muchas cosas, pero la clave es mantener el rumbo" y ha augurado que si hay avances "la derecha judicial actuará". Además de la mesa de diálogo, Aragonès también ha salvaguardado las negociaciones con el Gobierno para los Presupuestos Generales del Estado.
Respecto a las relaciones con JxCat y la composición de la mesa de diálogo, el presidente autonómico catalán ha insistido en que los componentes de su delegación deben ser miembros del Govern porque "esto es una negociación de país a país". Aragonès ha hecho estas declaraciones en una entrevista en el circuito en catalán de RTVE.