"Trabajaré con la comunidad educativa por una FP y una educación inclusivas, equitativas y de la máxima calidad", reza el primer tuit de la nueva ministra de Educación tras conocer su nombramiento. Lo que muchos se preguntan es cuál será su postura frente a la concertada y la privada, ya que, tal y como ha revelado Voz Populi, Pilar Alegría lleva a su único hijo a un colegio privado, concretamente al Liceo Francés Molière de Zaragoza.
Se trata de una conocida escuela internacional que, según su página web, cuesta entre 4.000 y 5.000 euros por curso. El comedor supone hasta 1.300 euros al año y el transporte, de necesitarlo, cerca de 1.000 euros más.
Es decir, que se trata de un exclusivo colegio de los que el PSOE parece despreciar y que, sin embargo, muchos de sus dirigentes eligen para sus hijos. No en vano, la propia ministra saliente, Isabel Celaá, también ha sido cuestionada por la incoherencia de sus ataques a la concertada y a la privada, cuando ella misma llevaba a sus hijos a un colegio religioso y que separa a los niños por sexos.
¿Maestra sin experiencia?
Este hecho, sin embargo, no es el único por el que Pilar Alegría se sitúa en el punto de mira. A pesar de que en su curriculum presume de ser diplomada en Magisterio y de contar con un Máster Universitario en Estudios Avanzados en Educación Social por la Universidad Complutense, no hay rastro de que haya ejercido como maestra, algo que incluso le reprochan desde la izquierda.
"Pasamos de una Ministra de Educación que educaba a su hijas en colegios privados a una ministra de la que no se ve en su trayectoria rastro de haber impartido clase", denuncia en Twitter el dirigente de IU Antonio Maillo.
Pasamos de una Ministra de Educación que educaba a su hijas en colegios privados a una ministra de la que no se ve en su trayectoria rastro de haber impartido clase.
— Antonio Maíllo🔻 (@MailloAntonio) July 10, 2021
Portavoz de Susana Díaz
Su primera incursión en la política llegó en 2008, como diputada por Zaragoza en el Congreso entre 2008 y 2015. Durante los tres primeros años, además, fue miembro de la Ejecutiva Federal socialista. Tras esta primera etapa, fue nombrada consejera de Innovación, Investigación y Universidad del Gobierno de Aragón. En 2019, pasó a ser portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Zaragoza y un año después Pedro Sánchez la nombró delegada del Gobierno en Aragón.
A nivel nacional, su rostro se hizo conocido en 2017 tras convertirse en portavoz de Susana Díaz en las primarias en las que el hoy presidente se hizo definitivamente con la Secretaría General del PSOE. Unos años antes, también había apoyado a Eduardo Madina, que también perdió ante Pedro Sánchez. Habidas cuentas de su curriculum, su nombramiento como ministra de Educación tampoco estará exento ahora de polémica.