El aspirante de ERC a la presidencia de la Generalidad, Pere Aragonès, recordó a sus abuelos andaluces en la segunda sesión de investidura. Se refirió a ellos como "el Antonio y la Juani, de Palomares", donde cayó la bomba. Pretendía ilustrar así la supuesta capacidad integradora del nacionalismo y reivindicar sus presuntos orígenes humildes. A quien no citó Aragonès fue a ningún miembro de su familia de la rama paterna, esa parte de la familia que tuvo una sociedad en el paraíso fiscal de las Antillas Holandesas.
Según revela Crónica Global, el padre de Aragonès y los tíos del político poseían una compañía radicada en Curazao y dedicada a la gestión de los hoteles que la familia posee en Cataluña. La entidad se llama Phedra Hotels Holding SL y fue inscrita en el Registro Mercantil de Barcelona en junio de 2013 gracias a una repatriación producida al calor de la amnistía fiscal del Gobierno presidido por Mariano Rajoy.
En aquella época, Pere Aragonès era un joven y ambicioso dirigente de ERC, ya diputado en el Parlament al que se atribuía la creación del eslogan "España nos roba" y que medraba en el partido bajo la tutela de Oriol Junqueras. En cuanto a los negocios de su familia en el Caribe, la sociedad contaba con unos activos de 3 millones de euros y un patrimonio neto de 2,9 millones, recurso que correspondían a inversiones financieras a largo plazo.
No comenta "información privada"
Según el referido medio, la instrumental de las Antillas Holandesas era la compañía que ocupaba la cima del negocio hotelero de los Aragonès Poch. Preguntado por los vaivenes societarios de su familia, un portavoz del aspirante a president aduce que el candidato "no comenta información privada de terceras personas".
Los Aragonès poseen una red hotelera compuesta por los siguientes establecimientos: el Bahía de Tossa y el Mar Menuda, en la Costa Brava; el Taurus Aquapark Resort, en la costa de Barcelona; más el Port Salou, el Donaire Beach, el Costa Salou y el Avenida Family Suites, en la Costa Dorada. En total suman 1.930 habitaciones. Cuentan con una plantilla de 330 trabajadores que en la actuación están en situación de regulación temporal. El emporio hotelero contabiliza unos activos agregados de 90 millones y el valor de coste de los inmuebles es de 58 millones. El año anterior a la pandemia, el conglomerado ingresó 36 millones y declaró un beneficio de 3,6 millones. Sus recursos propios se cifraron en 46 millones.
El abuelo franquista y de AP
La fortuna procede de José Aragonés Montsant, abuelo de Pere Aragonès y alcalde de Pineda de Mar (Barcelona) durante la fase final del franquismo. Después continuó como alcalde bajo las siglas de Alianza Popular. En los años cincuenta, José Aragonés Montsant adquirió hoteles y montó una fábrica textil que quebró en 2002.
La de Aragonès no es ni mucho menos la única familia nacionalista con negocios en paraísos fiscales. En ese listado tienen un lugar de honor los Pujol y el padre de Artur Mas, al que en 2008 se le descubrieron varios depósitos el banco suizo UBS y en el Liechtenstein Global Trust, con unos fondos de 2,3 millones. El padre del expresidente de la Generalidad aprovechó otra amnistía fiscal, en este caso del Gobierno de Zapatero, para repatriar los fondos.
Los negocios y las andanzas de la familia Aragonès en el Caribe trascienden en plena negociación entre ERC y Junts per Catalunya (JxCat) para formar gobierno en Cataluña y tras dos debates de investidura en los que Aragonès presumió del contenido social de su acuerdo con la CUP, un pacto que prevé una ley de vivienda que facilitaría la expropiación de inmuebles a grandes propietarios entre otras medidas.