Sánchez ha "apisonado el relato verdadero del terror", escribe este viernes el presidente de Dignidad y Justicia Daniel Portero, hijo de Luis Portero García, fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (asesinado por ETA el 9 de octubre de 2000) en el diario El Mundo. Consuelo Ordóñez, presidenta de Covite y hermana de Gregorio Ordóñez (asesinado por ETA el 23 de enero de 1995), se quejaba en TVE este mismo jueves por la noche de la performance de destrucción de armas de ETA puesta en marcha por Pedro Sánchez. Una representación que sucedía, recuerda Portero, mientras el Gobierno negociaba en el Ministerio de Política Territorial la transferencia de competencias en materia penitenciaria al País Vasco a partir del 1 de abril. Ordóñez decía que el acto de ayer representaba el "rotundo fracaso del Estado de derecho con las víctimas del terrorismo".
Y es que el acto ha resultado grotesco para numerosas víctimas de ETA, entre otras cosas, porque, como recuerda este viernes Daniel Portero, por mucho que se quiera vender la derrota de ETA, sus herederos están con el Gobierno y las víctimas de más de 370 asesinatos etarras continúan sin haber conocido la justicia. Ahora, los herederos de Batasuna-ETA que apoyaron la investidura de Sánchez son los mismos que podrían ayudar a esclarecer esos 370 asesinatos. Pero, para eso, no hay performance que valga.
Iván Redondo, ideólogo de Moncloa al que se le atribuye cada acto de propaganda del Gobierno, parece que no tuvo una idea original con este gran acto propagandístico con tanqueta apisonadora incluida, ya que hay otros ejemplos cercanos. Uno muy sonado sucedió hace algo menos de 18 años cuando, en diciembre de 2003, la artista María Jiménez apareció en los medios con una apisonadora, destruyendo cientos de discos en plena calle. Su performance o representación pretendía ser una protesta contra la piratería. No sólo se montó a los mandos del gigante rodillo motorizado, sino que se bajó y zapateó sobre las copias.
Ni Sánchez ni Redondo han zapateado sobre las armas de ETA, pero el paralelismo es extraordinario. ¿Sería María Jiménez la inspiración de Iván Redondo en este nuevo acto de propaganda de los socialistas?