Hace pocas fechas el diputado de las rastas de Podemos, Alberto Rodríguez, publicaba un vídeo en redes sociales en el que se mostraba extraordinariamente indignado por las sospechas que levanta la "caja B" de Podemos que denunció su exabogado José Manuel Calvente. Rodríguez, en aquel vídeo que ha sido parodiado con éxito en redes sociales, Rodríguez decía que esa caja no era "B", sino "S" de "solidaridad", porque Podemos es un partido muy solidario, destacaba el líder podemita canario.
Pues bien, según publica el diario El Mundo este martes tampoco parece tener mucha solidaridad esa caja a la que hacen aportaciones los miembros del partido y aque sólo dedica a fines sociales un 18%, es decir menos de uno de cada cinco euros de los que contiene ese fondo que está siendo investigado por la justicia por posibles irregularidades en la financiación de la formación morada.
El dinero destinado de la caja "S de solidaridad", como decía Rodríguez, durante el año pasado a proyectos sociales fue, siempre según la formación, de 360.000 euros, cuando en la caja había 1,9 millones de euros. En cualquier caso, las donaciones, la caja y los proyectos sociales han pasado de ser una de las banderas de Podemos, uno de esos argumentos que esgrimen para reivindicar su superioridad moral, a convertirse casi en un tabú, en el que no explican a qué proyectos solidarios han ido destinados esos cientos de miles de euros. En 2018 el porcentaje dedicado supuestamente a proyectos sociales fue todavía menor, no llegó al 8,2%, ya que la caja contaba con 2,8 millones de euros y se fueron a iniciativas supuestamente sociales 238.000.
Ahora, esa llamada caja de solidaridad está siendo investigada por el juzgado de instrucción número 42 de Madrid, en el marco de las pesquisas iniciadas tras la denuncia del ex abogado del partido José Manuel Calvente, donde, entre otras cosas, denuncia el descontrol que tiene Podemos de esa caja.