Santiago Abascal se ha desplazado hasta Vitoria para arropar a los candidatos de Vox en las elecciones vascas del próximo 12 de julio. Al igual que en los comicios gallegos, el partido ha decidido presentar tres aspirantes, uno por provincia, sin designar candidato a la presidencia de la comunidad por lo que todo el protagonismo recaerá sobre el líder de Vox.
Durante el acto, celebrado en un polígono industrial, al igual que en el caso de Galicia y las elecciones autonómicas y locales del pasado mes de mayo, y bajo el lema "Vox habla por ti", Abascal ha lanzado un órdago al PNV y Bildu al reclamar la ilegalización de los partidos que "quieran romper la unidad nacional", denunciando que su existencia es "una contradicción de la democracia española".
El líder de Vox ha acompañado a sus cabezas de cartel, Amaia Martínez por Álava, Niko Gutiérrez por Vizcaya y María Pérez por Guipúzcoa, en un llamativo escenario compuesto por cuatro paneles en los que se podían leer frases como Imposición del euskera, Caso Zaldíbar, Menas y Homenaje a etarras, con la última palabra de cada una tachada y acompañadas por el término "silencio", en referencia al lema escogido por el partido para la campaña.
La formación aspira a conseguir entrar en el Parlamento vasco, siendo Álava la provincia donde más esperanzas tienen de conseguir escaño, según trasladan fuentes del partido. Una posibilidad que parecía más cercana en la anterior convocatoria electoral, cancelada por la pandemia del coronavirus. Todas las encuestas les sitúan ahora fuera de la Cámara aunque desde el partido se muestran convencidos de poder dar la sorpresa y mejorar sus expectativas a medida que avance la campaña, como ya ocurrió en las últimas elecciones generales.
La violencia en campaña
A preguntas de la prensa, Abascal ha condenado el vídeo en el que un tirador hace prácticas disparando a fotografías de miembros del Gobierno. "Condenamos cualquier acto de incitación al odio y la violencia, sin matices, con toda claridad", ha señalado antes de reprochar al Ejecutivo que no haga lo mismo cuando las amenazas se dirigen hacia Vox.
El líder del partido les ha responsabilizado de lo ocurrido la semana pasada en Galicia, cuando un grupo de violentos profirió amenazas contra los miembros del partido al grito de "¡esta vez vais vosotros a las cunetas!", y de los últimos ataques sufridos en sus sedes de León y Gerona, motivo por el cual han registrado en la Junta Electoral Central un manifiesto para condenar la violencia y pedir que lo respalden el resto de formaciones sin que, de momento, hayan recibido respuesta alguna.
"Han dicho de Vox que quiere que los inmigrantes se ahoguen en el mar, que las mujeres sean agredidas en sus casas, racista, fascista, nazis... han dicho que somos una inmundicia política que acabará desapareciendo", ha criticado con dureza Abascal señalando al Gobierno.
Diez propuestas para el País Vasco
El partido ha presentado su programa electoral para los comicios con diez propuestas similares a las de Galicia aunque con varias novedades entre las que destaca "garantizar el cumplimiento íntegro de la Ley de Reconocimiento y Reparación de las Víctimas del Terrorismo", con la promesa de "perseguir y aumentar las penas para cualquier acto de homenaje a terroristas", así como "impulsar la persecución de los delitos no resueltos".
Como primera medida, prometen "garantizar la presencia del Estado en el País Vasco" y "acabar con los 40 años de imposición del nacionalismo en las instituciones políticas educativas y jurídicas". También proponen garantizar la seguridad de las familias cerrando los centros de MENAS, así como un plan para luchar contra la okupación.