El caso Delcy y el marcaje de la oposición al ministro José Luis Ábalos por este asunto, dejaba el momento más bronco de la sesión de control al Gobierno de este miércoles.
La pregunta del diputado del PP, Andrés Lorite, cuestionando su permanencia al frente del ministerio de Transporte tras su encuentro con la vicepresidenta del régimen chavista de Nicolás Maduro, sacaba de sus casillas a Ábalos hasta el punto de llegar a recurrir al 11-M para pone en duda las intenciones de la oposición.
Lorite le reprochaba "haber hecho de la mentira su método", a lo que el ministro respondía elevando el tono y con el rostro desencajado, acusando al PP de ser "el partido de la mentira". "El PP nos hizo creer a toda España y al mundo que el peor atentado que ha tenido España lo hizo ETA para salvarse", le espetaba nervioso el ministro desde su escaño.
Ábalos recurría a otra tragedia que tuvo que afrontar el Gobierno de José María Aznar para reprochar al PP que "no quisieran identificar a los soldados del Yak-42". "¿Ustedes son el partido de la verdad?", le preguntaba a gritos el ministro, completamente fuera de sí.
Tanto el 11-M como el Yak-42 han sido utilizados de forma habitual por el PSOE como arma arrojadiza contra el PP cuando ha sido cuestionado por sus escándalos. El ministro continuaba preguntando a los populares si "les preocupa Venezuela" cuando "son los que están utilizando a la policía".
Al concluir su intervención, Ábalos era arropado por todo el Gobierno y las bancadas del PSOE y Podemos con un sonoro aplauso mientras la oposición gritaba "¡dimisión, dimisión!. En ese momento, los diputados de la bancada de la izquierda, que ya habían concluido y permanecían sentados en sus escaños, se levantaron de nuevo para ovacionar en pie al ministro.
Una escena que recuerda a la protagonizada por el exministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, al que respaldaba el Gobierno en el Congreso con un sonoro aplauso apenas unos días antes de ser cesado por su polémica imagen junto al entonces juez Baltasar Garzón durante una cacería, en plena instrucción del caso Gürtel.