La Junta Electoral de Barcelona ha despejado la variable de la inhabilitación inmediata del presidente de la Generalidad, Quim Torra. La condena de un año y medio sin ejercer cargo público por desobediencia emitida por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) no es firme. Cabe recurso ante el Tribunal Supremo y la defensa de Torra ha anunciado que acudirá ante esa instancia, de modo que el presidente regional catalán podrá seguir en el cargo.
Según la Junta Electoral, no caben las alegaciones de PP, Ciudadanos y Vox para ejecutar de forma inmediata la sentencia del TSJC. Los tres partidos aludían a una modificación en la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (Loreg) de 2011 mediante la que no era necesaria una sentencia firme en supuestos de terrorismo, rebelión, corrupción o desobediencia para que el afectado resultara inelegible y apartado de sus funciones.
Como se recordará, el TSJC condenó a Torra a un año y medio de inhabilitación por desobedecer una instrucción de la Junta Electoral Central para que retirara una pancarta a favor de los presos golpistas del balcón del palacio de la Generalidad durante el periodo electoral por juzgarla partidista. Torra se declaró culpable, pero aún así su defensa ha anunciado que acudirá al Tribunal Supremo.
Un voto particular
La Junta Electoral de Barcelona alega que los precedentes de aplicación del cambio en la Loreg son relativos a alcaldes condenados por corrupción sin fallo firme. Contra la decisión cabe recurso en el plazo de un día hábil. Se ha registrado un voto particular a favor de admitir las alegaciones de PP, Ciudadanos y Vox.
Cambia el escenario y queda despejada la legislatura catalana hasta que se pronuncie el Supremo, lo que se puede demorar hasta más de un año. En los últimos días se había especulado con un posible adelanto de las autonómicas una vez investido Pedro Sánchez con la abstención de ERC que tanto Torra como Puigdemont han negado. El prófugo es partidario de agotar la legislatura, que concluye en diciembre de 2021.