Iván Espinosa de los Monteros es, además de empresario y padre de cuatro hijos, cofundador de Vox. Su papel de portavoz parlamentario le obliga a estar en permanente contacto con los medios, con las ventajas y desventajas que ello supone. Ocupa también el cargo de vicesecretario de relaciones internacionales, puesto que encaja con su perfil profesional ya que ha trabajado muchos años fuera, en EEUU o Polonia, y domina a la perfección el inglés y el francés.
Su apellido le precede aunque evita hacer gala del mismo y ha relatado en varias ocasiones cómo, a pesar de sus orígenes, ha tenido que afrontar la quiebra de algunas de sus empresas y lo que significa empezar de cero. Recientemente se ha convertido en el centro de todas las miradas por su enfrentamiento con el portavoz del PNV, Aitor Esteban, al que dejó completamente desencajado por recordarle la historia de su partido. La entrevista se desarrolla la mañana antes del debate entre candidatos del lunes 4.
PREGUNTA: La situación de Cataluña ha aupado a Vox en las encuestas. Si se resolviera la situación ¿seguiría siendo útil su partido?
RESPUESTA: No nos creemos mucho las encuestas. Ni las que nos daban resultados muy malos ni las que nos dan resultados que yo creo que están muy inflados. Pero Vox es útil por sí mismo. Las ideas que nosotros estamos defendiendo por desgracia no las defiende nadie más. Es la propia justificación de la existencia de Vox: que decimos cosas que nadie más dice y lo que decimos son cosas de lo más normal y de sentido común. Son las cosas que nos dice la gente en la calle todos los días. Las ideas que propone Vox son útiles siempre.
P: ¿Temen que ese ascenso en los sondeos les perjudique?
R: Estamos viendo encuestas exageradas para, primero, si uno obtiene muy buen resultado pero no se llega a las encuestas que se pueda transmitir casi una decepción cuando en realidad habrá sido un éxito. Por ejemplo, Vox tiene ahora 24 diputados, si el resultado fuera que sacamos 36 sería un crecimiento del 50% que sería espectacular pero 36 es menos de lo que ya auguran algunas encuestas. Entonces, algunos periodistas dirán que no hemos cumplido las expectativas.
Lo segundo que hacen los medios y los periodistas de izquierdas es inflar esas expectativas para generar miedo. Ante la falta de capacidad de ilusionar con propuestas y con ideas, la izquierda, Pedro Sánchez y muchas terminales mediáticas de su entorno, están azuzando el miedo como si fuera el dóberman en los años 90 contra el PP, y lo que se hizo contra nosotros en la campaña de abril: que llega la ultraderecha, los malos malísimos, tiene que venir usted a votarme aunque no crea en mí, ni esté ilusionado con mis ideas, venga a votarme por miedo, no por ilusión.
P: ¿Qué resultado sería un fracaso para Vox?
R: Nosotros preferimos hablar en términos positivos. Creo que lo bueno sería crecer. El proyecto de Vox no es gobernar el 11 de noviembre. El proyecto de Vox es llegar a gobernar dentro de poco, pero es un proceso por etapas. Lo primero fue irrumpir en las instituciones y eso se logró hace ahora casi un año con la entrada en la Junta de Andalucía que era improbable y parecía casi imposible. Lo segundo era empezar a cambiar gobiernos que eso sí que parecía absolutamente imposible. Se consiguió en Andalucía, en el Ayuntamiento de Madrid, Murcia, la comunidad de Madrid...y esa etapa se está cumpliendo con cierto éxito.
La tercera etapa es entrar con más éxito en esas instituciones que es lo que creo que vamos a conseguir ahora, entrar en el Congreso con aún más fuerza. Teníamos 24 y sin duda vamos a crecer, el optimismo que nos rodea parece indicar eso. Y ya la tercera etapa será empezar a tomar control de los gobiernos en algún sitio y eso vendrá muy pronto.
P: Usted lideró las negociaciones para formar gobiernos con PP y Cs en Madrid y Murcia ¿se siente satisfecho de cómo se desarrollaron?
R: Hay cosas muy positivas que se han obtenido, por ejemplo en Andalucía, donde hemos sacado adelante dos presupuestos, y en general hay cosas, con sus luces y con sus sombras, que han ido razonablemente bien. En Murcia o Madrid ha pasado poco tiempo pero en el caso de la comunidad de Madrid hemos visto algunas cosas que no nos han gustado. Que el primer día a las 9 de la mañana el Gobierno de PP y Cs haya incrementado un 40% la estructura administrativa, pasando de 9 a 13 consejerías, es algo que choca frontalmente con lo que a nosotros nos gustaría y ellos prometieron pero no todo se puede conseguir.
Lo que sí hemos conseguido son pequeños hitos. Sobre todo estamos generando un cambio cultural que yo creo que es muy importante y que ellos poco a poco vayan entrando en el canal de ideas y valores que nosotros venimos defendiendo hace mucho tiempo. Si se da la circunstancia, Vox ha demostrado sobradamente su capacidad de negociación y la defensa de esas ideas y valores que nos caracterizan.
P: ¿Es entonces partidario de un acuerdo de gobierno con PP y Cs después del 10-N?
R: A Cs no se muy bien qué futuro le espera pero yo no tengo ninguna duda de que Santiago Abascal acabará siendo presidente del Gobierno, no digo ahora, eso sería un exceso, pero de aquí a unos años Abascal acabará siendo presidente del Gobierno. Y por tanto, sí, buscaremos esas negociaciones. Y si por el camino hay otros gobiernos posibles en los que las ideas y valores de lso votantes de Vox se puedan defender, pues estaremos dispuestos a defender esas ideas y valores.
P: ¿Qué opina de la caída de Cs en las encuestas?
R: No me quiero adelantar a lo que es posible que suceda dentro de poco, pero sí creo que la gente no es tonta y se acaba dando cuenta de que hay algunos que tienen principios, ideas y valores y los mantienen firmes con el paso del tiempo, lógicamente adaptándose a las novedades que se van produciendo en política, pero las ideas son claras y tienen su voto seguro. El que vota a Vox sabe seguro lo que vamos a hacer con su voto. En otras formaciones no es así y eso se acaba pagando.
P: TVE ha restringido el horario de emisión de uno de sus vídeos de campaña que muestra imágenes violentas de inmigrantes ¿Se puede vincular la violencia con la inmigración?
R: Lo que se puede vincular con total seguridad es la emergencia de Vox con cortapisas y cortafuegos de ciertos medios y partidos que no quieren que aparezcamos. En TVE se nos impidió hablar de inmigración ilegal en el debate de portavoces y es uno de los problemas que más preocupa a los españoles.
Según el CIS, un 18% de los españoles están preocupados con la inmigración ilegal, las consecuencias que eso tiene en la convivencia de sus barrios. De la misma manera que no nos dejaron hablar en la Diputación Permanente de lo que está sucediendo en las calles de Cataluña. Pero los españoles son muy libres y cada vez más inteligentes y saben que los problemas de los que les estamos hablando son de sentido común y están en la conversación de todos los bares, cafeterías, calles, colegios… que preocupan a todo el mundo y seguiremos defendiendo esas ideas.
P: Pero ¿se puede asociar un incremento de la violencia en España a la llegada de inmigrantes?
R: Si uno mira la población carcelaria y el número de delitos que se cometen en España no hay ninguna duda de que hay una mayor proporción de delitos cometidos entre la población inmigrante que entre la población nacional y, especialmente, entre la población inmigrante ilegal. Es natural. No digo que sea sólo culpa de los inmigrantes, es lógico querer prosperar y tener una vida mejor. Lo que no es lógico es llamar a que vengan inmigrantes ilegales sin papeles, sin un plan, sin que les podamos ofrecer un trabajo porque sólo tienen dos salidas: o bien acogerse a las ayudas sociales, que suponen un enorme gasto para nuestro Gobierno que no se puede dedicar a nuestros mayores, a nuestras pensiones o a nuestros dependientes; o, si no tienen un trabajo y tampoco tienen ayudas sociales, la otra salida que les queda, obviamente, es la delincuencia.
P: Usted ha trabajado mucho tiempo en el extranjero. ¿La inmigración enriquece a los países?
R: Depende de cómo se produzca. La generación de nuevas ideas y de gente que aporta cosas nuevas sí es una buena idea y, en ese sentido, una inmigración ordenada y legal ha traído muchos beneficios a muchos países. En el caso de EEUU, donde yo he vivido muchos años, se establece todo los años por parte del Gobierno americano un número de personas que puede entrar en el país para cada profesión. Eso enriquece una nación.
Lo que no enriquece nada es decir: mire, estas son nuestras reglas pero si usted las rompe le vamos a aceptar de todas maneras. Eso es injusto para los nacionales y los inmigrantes legales. En España hay mucho inmigrante legal que ha llegado haciendo la cola, sometiéndose a nuestro proceso y de repente ven cómo otros por saltar una valla o entrar por el aeropuerto y exceder su visado, no sólo no se les castiga sino que se les premia. Lo que estamos haciendo es incentivar la inmigración ilegal y como todas las actividades ilegales, no me parece que sea una buena idea.
P: Durante el debate de la semana pasada protagonizó un enfrentamiento con el portavoz del PNV, Aitor Esteban. Si se cruza con él en el Congreso, ¿intentará volver a saludarle?
R: La cortesía parlamentaria es deseable. Si Esteban es un maleducado no voy a insistir porque yo sí soy una persona educada. En el fondo lo único que le ha pasado es que se ha quedado muy sorprendido porque durante 40 años nadie le ha dicho estas cosas al PNV y lo único que hemos hecho ha sido leerle, literalmente, sin emitir ningún tipo de opinión ni juicio, cosas que había escrito el fundador de su partido. Son relevantes porque son esas ideas en base a las cuales se fundó su partido, en base a ideas racistas, xenófobas, homófobas que son las que defendía Sabino Arana. Claro, leérselas literalmente le ofendió mucho. Lo que es ofensivo no es que yo se lo lea, sino lo que escribió él.
P: ¿Por qué han mantenido más enfrentamientos con el PNV que con el resto de partidos nacionalistas?
R: El PNV es culpable de cosas muy graves porque ha gobernado durante muchos años. Ha sido tremendamente corrupto, la trama que empezó a investigar la abogada del Estado, Macarena Olona, cuando estaba a punto de destaparse, cuando va a declarar al juzgado, se paró destituyéndola cuando la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, recibió la pertinente llamada del PNV y se le pidió que apartara a esta persona que estaba investigando aquello y así fue cómo se evitó conocer uno de los mayores escándalos de corrupción de España.
Nosotros decimos que el escándalo del PNV es el mayor escándalo del que nadie ha oído hablar jamás porque se evitó la investigación destituyendo a Macarena Olona. Pasan los años y Macarena Olona pasa a ser diputada de Vox y como es una persona que tiene memoria, le recuerda en sede parlamentaria al PNV lo que hicieron, se ponen muy nerviosos y nos atacan. Pero lo único que estamos haciendo es recordar lo que realmente pasó y el nido de corrupción que rodeaba al PNV cuando gobernaba y que probablemente siga. No lo sabemos pero lo investigaremos.
P: Proponen ilegalizar a los partidos nacionalistas. ¿Acabaría eso con el independentismo?
R: No, lo que nosotros proponemos es que los partidos que no acepten la unidad de España no puedan participar del juego político. De la misma manera que en los años 90 se aprobó, y a todo el mundo le parece natural, que los partidos que no condenaban la violencia no pudieran participar del juego político. Lo que creemos es que esto mismo se debe aplicar a aquellos que no aceptan la unidad de España. Esto, que es la norma en Portugal, en Alemania y en otros muchos sitios, y que es algo razonable, deberíamos empezar a estudiarlo a partir de la siguiente legislatura.
P: ¿Por qué algunos de sus adversarios les definen como franquistas?
R: Somos un partido que tiene ideas diferentes, que dice cosas que nunca se habían dicho hasta ahora y eso ha removido los cimientos del establishment y hay partidos y periodistas que están intentando hacer una campaña tremenda contra nosotros. He visto incluso a Pedro J. Ramírez, que me recuerda bastante al 1984 de George Orwell, porque ya directamente, sin tapujos, le dice a la gente lo que tiene que hacer: "Ustedes tienen que votar a Ciudadanos", les dice. Es una cosa realmente increíble. Algunos informadores han pasado de ser proveedores de información a ser auténticas élites que le dicen a uno lo que tiene que hacer desde su, muy bien pagado, púlpito. Vox ha venido a remover algunas conciencias y eso crea escozor entre gente que está acostumbrada a controlar el sistema y a la gente.
P: Si condenaran el franquismo y opinaran sobre Franco ¿desaparecerían esas acusaciones?
R: Nosotros no estamos en esa batalla. Como dijo Santiago Abascal en Vistalegre Plus Ultra, entre nosotros hay gente que tiene abuelos o bisabuelos que luchó en un lado de la Guerra Civil o en otro. Incluso lo más probable es que haya quien tiene abuelos o bisabuelos en ambos bandos. Nosotros no venimos aquí a señalar con el dedo a aquellos cuyos bisabuelos hicieron o no hicieron no se qué cosas. Eso pasó hace 80 años.
Nosotros estamos pensando en los siguientes 80 años. ¿Qué vamos a hacer en el futuro para que España prospere, para que España crezca, para que tengamos un marco de convivencia en el que las ideas puedan florecer, las personas encuentren trabajo, haya una actividad económica, que seamos una nación cohesionada? Estamos buscando aquellas cosas que nos unen, no lo que nos divide. Hay otros que están más preocupados en buscar divisiones entre nosotros y lo que pasó hace 80 años. Nos parece absurdo.