El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha concedido su primera entrevista después del debate a cinco al programa Es la Tarde de Dieter, de esRadio, donde ha dicho sentirse "satisfecho" por el resultado de la contienda ya que le ha permitido transmitir su mensaje "sin distorsiones", para que "muchos españoles que no nos conocían, nos conozcan".
Ante la estrategia promovida por la izquierda de agitar el fantasma del miedo contra Vox para movilizar a su electorado, como ya ocurrió el pasado 28 de abril, el líder de Vox ha defendido que el debate les permitió lograr sus objetivos "sin asustar a nadie" para no parecer "un gran coco que pueda atemorizar a algunos votantes" como, según asegura, quieren "dibujar" a su partido.
Abascal ha admitido que en la primera parte del debate evitó entrar en el cuerpo a cuerpo con el resto de candidatos para priorizar sus mensajes frente a la discusión con el resto de líderes políticos para no restar tiempo a sus intervenciones, aunque ha admitido que esa "renuncia" pudo ser un "error" ya que tendría que haber intervenido más en los momentos iniciales. En cualquier caso, ha defendido su papel evitando mostrarse eufórico.
El enfrentamiento con Errejón
En esos ataques promovidos por la izquierda contra su partido ha englobado las críticas vertidas por Íñigo Errejón contra su padre ya fallecido, Santiago Abascal, por el dinero que cobró como víctima de ETA. "La chusma miserable se retrata a sí misma", ha respondido el líder de Vox para quien sus declaraciones "demuestran su catadura moral". "Están donde siempre han estado, con la ETA y los enemigos declarados de España", ha rematado indignado contra el candidato de Más País.
Preguntado por las encuestas, el líder de Vox ha asegurado que se trata de "un profundo error hablar de expectativas" y que su objetivo es ganar las elecciones, algo que según admiten es difícil en estas elecciones y, por ese motivo, "aceptarán con tranquilidad" el resultado que les den las urnas. "Buscamos ser una alternativa patriótica", ha asegurado.