Todas las encuestas auguran una importante caída de Vox en caso de que finalmente haya nuevas elecciones el próximo 10 de noviembre. La última de ellas, el CIS que apenas les da un 3,5% de votos, convirtiéndoles casi en un partido extraparlamentario. A pesar de los malos presagios, la dirección de Vox no sólo confía en mantener los apoyos del pasado 28 de abril, sino en poder aumentarlos.
Una de las conclusiones a las que llegaron tras las generales fue que la falta de recursos para enviar papeletas perjudicó su resultado final. En la formación están convencidos de que, debido a la estigmatización del partido, potenciales votantes que debían exponerse ante sus vecinos cogiendo su voto en el colegio electoral, optaron finalmente por otros partidos.
"El mailing es clave, ahora tenemos más recursos para enviar nuestras papeletas al mayor número de hogares posible", aseguran fuentes de la dirección del partido, convencidos de que esta será una de las bazas que marcará la diferencia. Poder llevar la papeleta en el sobre desde casa elimina el miedo a ser señalado.
El aumento de recursos es también otro de los puntos a favor que, según varios dirigentes, les permitirá poder enfrentarse en mejores condiciones a una campaña electoral. Según fuentes de la dirección, en las últimas convocatorias apenas pudieron gastar 1,5 millones de euros, recaudados a través de las cuotas de sus afiliados y el conocido como método del crowdfunding, para las generales, europeas y municipales y autonómicas. Una cifra que ahora aumentará gracias a su entrada en las instituciones.
La presencia en los medios
La ausencia de Santiago Abascal en todos los debates electorales de televisión, tanto el de Atresmedia como el de TVE, fue también otro de los puntos que analizó el partido después de las generales. "Creíamos que el protagonismo mediático que tuvimos esas semanas por el veto que sufrimos en los debates podría beneficiarnos pero no fue así", aseguran fuentes del partido. La posibilidad de dirigirse a una audiencia potencial de nueve millones de espectadores es una ventaja, opinan.
Otro de los puntos a su favor, aseguran, es la experiencia acumulada durante las últimas convocatorias electorales y la oportunidad que les brindan las tribunas del Congreso y los Parlamentos autonómicos para dirigirse a los ciudadanos. "Antes teníamos que ser más audaces para llamar la atención de los medios, ahora tenemos la posibilidad de explicar mejor nuestras propuestas", aseguran fuentes del partido que prevén una campaña dura con un tono similar a la del pasado mes de abril.