La coalición formada por Vox y Actúa en Baleares inicia la precampaña electoral con toda una declaración de intenciones: acabar con las políticas de imposición lingüística en las islas. Este será el eje central de su programa, tal y como ha dejado claro su líder, Jorge Campos, que ha prometido como primera medida, si su partido gobierna, derogar la Ley de Normalización Lingüística de 1986.
Con motivo del Día Internacional de la Lengua Materna, Campos ha ofrecido una rueda de prensa en la que ha retado a PP y Cs a adherirse a su propuesta para aprobar con carácter de urgencia, en el primer pleno de la próxima legislatura, una nueva Ley de Usos de Lenguas Oficiales que garantice la libertad de los ciudadanos: "Nada de trilingüismo, que es en realidad un timolinüísmo", asegura Campos en declaraciones a Libertad Digital.
El futuro candidato de Vox en la comunidad recuerda que la norma anterior fue aprobada por el PP y considera que es el "origen de todas las desigualdades y conculcación de derechos que sufren miles de familias". Por ello advierte de que su derogación y sustitución por una nueva, que "permita la libre elección de lengua en todas las etapas educativas", será un requisito indispensable para cualquier pacto posterior a las elecciones del 26 de mayo y exige su puesta en marcha de forma inmediata, en el próximo curso escolar que arranca en el mes de septiembre.
Advierte, además, sobre la falta de libertad lingüística que existe en la administración pública. Por ello, reclaman que el balear deje de ser un requisito para acceder a cualquier empleo público y que ni siquiera se considere un mérito en el caso de profesiones como bomberos, médicos o policías. Por último, Vox propone que cualquier ciudadano pueda utilizar libremente las dos lenguas para dirigirse a la administración.