Según el sondeo de Celeste-Tel que publica elDiario.es, el PSOE sería el partido más votado en unas hipotéticas elecciones, pero tendría a sólo tres décimas al PP: los socialistas lograrían un 24,1% de los votos -algo más de un punto menos que hace un mes-, mientras que los populares se quedan en el 23,8% tras dejarse nueve décimas desde enero.
En tercer lugar estaría Ciudadanos, que es el único de los cuatro grandes partidos que logra subir un poco: pasa del 19,4% al 19,6%. Unidos Podemos, por su parte, pierde una décima y se queda en el 16,1%.
Por último, VOX es el partido que mejor rentabiliza el resultado de las elecciones andaluzas: los de Abascal suben un punto y tres décimas desde diciembre, superan el 8% de intención de voto y mantienen una línea ascendente espectacular: en noviembre se quedaban en el 1,5%.
Según los datos que aporta eldiario.es la mayoría de los votantes de VOX vendrían desde el PP: el partido que lidera Santiago Abascal tendría cerca de dos millones de votos de los que tres cuartas partes son exvotantes de los populares. Además, recibiría un aporte significativo de Ciudadanos -casi 300.000 votos-, Podemos -unos 100.000- y el PSOE, cerca de 60.000.
Sin embargo, una parte importante de estos votantes ya habían abandonado al PP anteriormente, ya que en los últimos tres meses -que han sido en los que según el histórico de encuestas de Celeste-Tel VOX ha empezado a crecer- mientras que los de Abascal han subido más siete puntos los de Casado han perdido sólo dos y medio.
Mayoría absolutísima del centro derecha
La traslación a escaños que hace la propia encuesta coloca al PP ligeramente por delante del PSOE: los populares tendrían 97 o 98 diputados mientras que los de Sánchez se quedarían en un grupo de 95 a 97 escaños.
Ciudadanos sería el tercer partido del parlamento con entre 65 y 68 diputados, mientras que Podemos recibiría un correctivo bastante severo: perdería al menos una veintena de representantes respecto a los 71 que tiene actualmente y se quedarían en 48 o 50. VOX, por su parte, irrumpiría en el Congreso de los Diputados con entre 15 y 18 diputados.
Con estas cifras, la suma de partidos que ha pactado el gobierno en Andalucía tendría una mayoría absoluta holgada: incluso en la parte baja de la horquilla de los tres partidos obtendrían 177 escaños, mientras que en la alta se irían a los 184.
Por el contrario el PSOE tendría imposible gobernar con Podemos -en el mejor de los casos se quedarían en 147 diputados- y, de hecho, Sánchez no lograría mantenerse en la Moncloa ni siquiera reeditando a la inversa el acuerdo con el que Rajoy se mantuvo en el Gobierno hasta mayo del año pasado: la suma de socialistas, Ciudadanos y PNV se quedaría, como mucho, en 172 diputados.