Los separatistas confirman su intención de sentarse a negociar con el Gobierno los Presupuestos de 2019 alertados por la irrupción de VOX en el Parlamento andaluz. Tal y como informamos este lunes en Libertad Digital, tanto en ERC como en el grupo parlamentario del fugado Carles Puigdemont –el PDeCAT– se abren ahora a retomar las conversaciones con Moncloa para salvar la legislatura y frenar el ascenso de VOX a nivel nacional.
Después de que el presidente del Gobierno confirmara su intención de presentar los PGE tal y como adelantó Libertad Digital, esta mañana, en RNE, el vicepresidente económico de la Generalidad, Pere Aragonès ha afirmado que aunque no espera que les caiga del cielo una propuesta "mágica" del Estado, "si el Gobierno muestra su voluntad de querer solucionar las cosas se abriría una negociación de fondo", para ofrecerle sus apoyos en el Congreso. Para Aragonès "si existiese la voluntad no solo de hacer propaganda o de defenderse de la ultraderecha" se avanzaría más rápido en este aspecto.
A la misma hora, y en un desayuno informativo protagonizado por la ministra de Economía, Nadia Calviño, el diputado del PDeCAT, Ferran Bel, también mostraba la disposición de su partido a acercarse al Gobierno si Pedro Sánchez les presenta"una propuesta razonable" y no se olvida de la "generosidad con Cataluña" precisamente a dos semanas de la celebración de un Consejo de Ministros en Barcelona. "Está en las manos de Pedro Sánchez, no pueden jugar al trilero, debe presentar una propuesta", decía poco después en una entrevista en la Cadena Ser Cataluña donde instaba a Sánchez a decidir entre "PGE o VOX".
Un mes después de que el presidente catalán, Quim Torra, anunciase el fin del apoyo al presidente del Gobierno en el Congreso tras conocerse los escritos de la Fiscalía y Abogacía del Estado contra la cúpula separatista, los 17 diputados de ERC y PDeCAT en el Congreso cambian de estrategia y aunque la escenificación vaya por seguir presionando para conseguir beneficios de cara al juicio del 1-O, sus palabras suponen un giro en respuesta al temor a que el partido que ha marcado el calendario judicial, VOX, pueda instalarse en el Congreso de los Diputados o en el Parlamento catalán.
Tal es el miedo del independentismo a los de Abascal que anoche la televisión autonómica, TV3, alteró incluso la programación para emitir el documental: "VOX, la ambición de Santiago Abascal", producido por la ETB, en el que se le retrata como un "oportunista" que se ha refugiado en un partido político para satisfacer sus aspiraciones económicas y profesionales, y en el que, además, se cuestiona las fuentes de financiación del partido.