El PP respiró aliviado. En Génova se instaló la percepción de que el Tribunal Supremo acabará dando carpetazo más pronto que tarde al caso del máster, aunque Pablo Casado trató de evitar la euforia y pidió a los suyos contención hasta que llegue ese momento. "La verdad se abre camino poco a poco", exclamó Teodoro García Egea, tras la decisión de la fiscalía de no pedir que se investigue a su líder. "Algunos tendrán que pedir perdón", enfatizaron las fuentes consultadas, deseosas de pasar página de una vez por todas y tomar impulso.
Minutos después de conocer la postura del ministerio fiscal, Casado fue ovacionado en una reunión con cargos de su partido en la sede nacional. Génova convocó rápidamente a los medios gráficos para que pudieran dar cuenta de ese momento y, después, compareció el secretario general para proclamar la "honradez" de su líder. En las redes sociales, prácticamente todo el PP salió en su apoyo. "Hartos de la doble moral de la izquierda, de su linchamiento mediático, de su todo vale. La Fiscalía ha dicho lo que todos los profesionales del derecho debíamos manteniendo durante mucho tiempo: no hay indicios para investigar. Ladran, luego cabalgamos", escribió en Twitter José Luis Almeida.
Según fuentes de la dirección, Casado reclamó cautela, toda vez el Supremo ha de pronunciarse y hay precedentes de exposiciones razonadas que han sido admitidas con el informe en contra del fiscal, como ocurrió con Pedro Antonio Sánchez, quien fuera presidente de Murcia. Si bien, incluso sus más allegados deslizaron que "esto está hecho" y que "la pesadilla" acabará dentro de poco. "El informe de la fiscalía apuntala más la honorabilidad de Casado", se encargó de enfatizar García Egea en su rueda de prensa.
"Todos los valientes que dudaron de la honorabilidad de Casado, de su carrera, de sus convalidaciones, de su profesionalidad, están siendo desmontados por la vía de los hechos. Espero que todos los que han colaborado en su linchamiento bajen un poco el nivel, sean más comedidos, se retracten o al menos aprendan que la prudencia es una virtud que hay que practicar", argumentó García Egea.
Sánchez, al Senado
Así, convencidos de que el caso acabará diluyéndose, más aún después de que la Rey Juan Carlos haya archivado la investigación sobre la licenciatura en ADE de Casado tras detectar irregularidades, el PP se vio liberado para exigir explicaciones a Sánchez alto y claro por su tesis. "Ahora no podrá embarrar el debate cuando le llevemos al Senado", expusieron en la dirección nacional. El secretario general del partido, que no llegó a reclamar la dimisión del presidente, destacó una y otra vez la necesidad de que dé la cara. "Tiene que disipar de una vez por todas las dudas sobre su trayectoria", destacó.
El PP no apoyará la comisión de investigación que Ciudadanos quiere promover en el Congreso ni tampoco quiso opinar sobre la decisión del juez del máster de investigar a la exministra Carmen Montón, pero dejó claro que en el Senado, donde tiene mayoría absoluta y la formación naranja no tiene apenas voz, sí apretará a Sánchez. "Sigue escondido", se lamentó el número dos de la formación, que también criticó los bandazos de su Gobierno.
Preguntado por si no es una contradicción que el PP exija a Sánchez dé explicaciones por las acusaciones de plagio pero se niegue a facilitar los trabajos de Casado, Teodoro García se revolvió. "No es lo mismo un curso de doctorado no habilitante" como el del líder popular "que una tesis doctoral" que supone "el máximo grado académico", expuso. Esto es, el presidente del PP se seguirá resistiendo a enseñar dichos documentos, aunque en Génova son conscientes de que "todavía puede haber ruido" en ese sentido. "Es un caso anecdóctico, absurdo y absolutamente menor", dijo su número dos, para quien hay cuestiones muchísimo más importantes que deberían ocupar el foco mediático.