Era cuestión de horas que el exconsejero de ERC fugado en Bruselas, Toni Comín, renunciase a la delegación de voto después de que su situación procesal haya cambiado y ahora cuente con libertad de movimiento. En un escueto comunicado de 3 líneas, Comín señala que renuncia a este privilegio que le fue concedido cuando estaban activas las medidas cautelares interpuestas por la justicia belga adelantándose a la decisión que hoy mismo tenía que tomar la Mesa y que ponía en una situación muy complicada al presidente Roger Torrent. De mantener Torrent el voto delegado de Comín se habría arriesgado a incurrir en un presunto delito de prevaricación y a la suspensión automática de todas las decisiones parlamentarias que se tomaran en la cámara.
Ni los de JxCat, ni los suyos de ERC ni el propio Torrent estaban dispuestos a arriesgarse penalmente por el exconsejero fugado que sin embargo sí ha decidido aferrarse a su escaño –gracias al cual cobrará los 2.871,57 euros al mes según figura en la web del Parlament–dejando en una situación muy complicada al bloque separatista. Su escueta mayoría en la cámara cojea ahora un poco más dejándoles en número de escaños empatados con el bloque constitucionalista, si dejamos al margen a la CUP e incluimos a los comunes en el segundo grupo.
Un empate a 65 escaños que les obliga a depender continuamente de los radicales de la CUP –ahora ya nos les valdría con su abstención como en la investidura de Torra– o a buscarse nuevos socios para sacar adelante algunas iniciativas parlamentarias. Aquí podrían entrar en juego los de Xavi Domènech o en algunos casos quizá tantear a los de Miquel Iceta, principalmente en materia social, para dar continuidad a la legislatura y evitar nuevas elecciones. En cualquier caso, los suyos de ERC han salido este mediodía a decir que esta renuncia es "temporal" sin precisar hasta cuándo.
De momento, el de Carles Puigdemont es por ahora el único voto delegado que se mantiene y su situación de diferente porque él si tiene medidas cautelares impuestas por la justicia alemana que le obligan a informar de cada movimiento.Hay que recordar que gracias al voto delegado de Toni Comín junto con el del expresidente Carles Puigdemont fue posible la investidura en segunda vuelta de Quim Torra después de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, renunciase a recurrirlo tal y como sí hizo el grupo de Ciudadanos y el PPC en el Parlamento autonómico.