El PP volvería a ganar las elecciones según la encuesta que acaba de hacer pública el CIS. Lo haría, eso sí, perdiendo dos puntos respecto al anterior sondeo: los populares se quedarían en un 24%.
El sondeo, que se realizó del 1 al 10 de abril -es decir después de estallar el escándalo de Cifuentes pero antes del último vídeo y la dimisión de la popular- no da a Ciudadanos el puesto en cabeza que sí le dan muchos otros estudios sociológicos, pero sí sería por primera vez el segundo partido en el CIS: los de Rivera suben 1,7 puntos para quedarse en el 22,4%, superando a un PSOE que vuelve a caer: se deja 1,1 décimas para quedarse en el 22% en una línea descendente que se acelera ligeramente. Por su parte, Podemos sube seis décimas pero sigue cuarto, con el 19,6%.
Los dos grandes partidos históricos sufren así una trayectoria paralela e igualmente descendente: los populares, eso sí, están en una cuesta abajo más pronunciada: desde el CIS del pasado mes de abril el PP se ha dejado 7,5 puntos, prácticamente un cuarto de la intención de votos que tenía hace un año. Y si tenemos en cuenta el resultado electoral el desplome es de nueve puntos, más de una cuarta parte de su electorado.
Los socialistas se mantienen por encima del 19.9% que tenían en abril de 2017, pero también caen fuerte si tomamos en consideración los resultados que llegó a tener tras el triunfo de Sánchez en las primarias. Así, en julio de 2017 el CIS pronosticaba que el PSOE tendría el 24,9%, tres puntos más que ahora. Además, ya estaría ligeramente por debajo del 22,6% que obtuvo en las elecciones de 2016.
Por su parte, pese a haber subido ligeramente en las dos últimas oleadas Podemos se mantiene prácticamente en el mismo lugar en el que estaba hace un año: los de Iglesias tenían entonces un 19.9%. Además, el partido de Iglesias seguiría un punto y medio por debajo de su resultado en las elecciones de 2016 y, eso sí, muy lejos del 24,36% que la suma de Podemos e IU alcanzó en los comicios de diciembre de 2015.
Dentro del resultado de Podemos destaca el buen resultado que obtendría Compromís -pasa del 2,4% al 2,8%- mientras que la franquicia catalana -En Comú- se dejaría dos décimas y En Marea seguiría estable. La marca Unidos Podemos como tal tendría cuatro décimas más de apoyo que en el CIS anterior.
Los bloques mantienen su distancia
La distancia entre los diferentes bloques sigue idéntica a tal y como era hace tres meses: el centro derecha desciende unas décimas: la suma de PP y Ciudadanos llega al 46,4%, mientras que la suma de Podemos y PSOE se queda a casi cinco puntos, en el 41,6%.
Significativa evolución del voto directo
Un dato interesante de la encuesta es la evolución de la intención directa de voto -el dato en crudo de lo que les encuestados dicen a los entrevistadores sin ningún tratamiento posterior-.
En este apartado Ciudadanos se coloca por primera vez como líder con un 16,1%, mientras que las caídas del PP y del PSOE son más acusadas que en el resultado final: los populares se dejan 3,4 puntos para quedarse en el 12,1 y los socialistas 2,4 para tener sólo un 13,5%.
Podemos volvería a describir en este apartado el comportamiento que ha venido teniendo en los últimos sondeos del CIS: son las confluencias las que logran mantener al partido de Iglesias, mientras la marca central cae, aunque sólo sea una décima.
Rajoy, el líder menos valorado
Alberto Garzón es el líder más valorado, si bien supera sólo por una décima a Albert Rivera, que era el primero en el pasado sondeo. El de Ciudadanos se queda en un 3,79 -tenía un 4,01- mientras que el de IU sube del 3,67 al 3,8.
Rajoy es el menos valorado de los cabezas de lista de los grandes partidos incluso por debajo de Pablo Iglesias: el presidente del Gobierno sólo tiene un 2,59 -tuvo un 2,86 en enero-, y el de Podemos sube del 2,54 al 2,77. Pedro Sánchez, por su parte, también cae como cae su partido: tenía un 3,68 y ahora sólo obtiene un 3,35.
La encuesta ha contado con casi 2.500 entrevistas que se realizaron durante lo primeros diez días del mes de abril.