
El PP volvería a ganar las elecciones. Sigue en caída libre, pero Ciudadanos no logra situarse por delante. Y a ello se aferraron en Génova. "Hay partido, minutos y minutos de partido", proclamaron desde el equipo de Mariano Rajoy. El CIS se elaboró "en el peor momento para nosotros", con Cristina Cifuentes agonizando en términos políticos y varios ministros poniendo en un brete al presidente. "Pero resistimos" y "no estamos tan mal como parece", apostillaron las fuentes consultadas.
Para la dirección nacional, habría sido "terrible" que Ciudadanos hubiera adelantado al PP. "Un auténtico desastre". Por ello, cuando observaron que aún continúan primeros, la primera reacción en Génova fue de alivio. Un poco de oxígeno tras semanas muy duras. "Que el sondeo del CIS venga positivo hace que una media sonrisa aparezca. Pero nada de optimismo porque seguimos estando los primeros, todavía queda remontar", afirmó Fernando Martínez-Maillo, en declaraciones a La Sexta. En paralelo, Rafael Hernando recomendó al partido naranja que "no viva tan pendiente" de los sondeos.
Ahora, Génova intentará revertir la tendencia, frenar la sangría de votos hacia Ciudadanos. "Hay partido", no se cansaron de repetir portavoces autorizados del partido. Lo primero será poner en orden el PP de Madrid y evitar por todos los medios nuevos sobresaltos. Maillo confirmó que Pablo Casado entrará previsiblemente en la nueva dirección regional, en la que también tendrá un hueco José Luis Martínez-Almeida. El encargado de pilotar la operación, Pío García Escudero, pidió algo de tiempo y rechazó, en una charla informal con periodistas, que tenga que anunciar su equipo en el Comité Ejecutivo del próximo martes.
En el Senado, preguntado por Ramón Espinar, Rajoy se vio en la obligación de pronunciarse sobre la crisis madrileña. Aseguró que Cifuentes "dimitió bien", pero precisó que su renuncia "nada tuvo que ver" con su gestión en la Comunidad de Madrid "que fue enormemente positiva". Y enumeró los datos económicos de la región. Por la mañana, sacó por fin tiempo para hablar con Ángel Garrido, al que ha permitido seguir en la Puerta del Sol hasta las próximas elecciones. "Le he dicho que voy a llevar a cabo el proyecto del PP", desveló el todavía presidente en funciones, no sin admitir que "objetivamente hay personas mejores" que él para el cartel electoral de 2019.
Soraya Sáenz de Santamaría no dijo ni que sí ni que no. "Yo siempre digo lo mismo, porque no puedo decir otra cosa", esquivó la cuestión en los pasillos de la Cámara Alta. En otras palabras, que hará lo que le mande el presidente. Para una buena parte del PP, "es evidente que tendrán que ser candidatos potentes, con los que tengamos alguna oportunidad". Diputados y senadores vieron más claro que nunca que Casado está ya en la casilla de salida.
En síntesis, para un sector del PP, el revulsivo ha de ser "total" . De nuevo, se habló de "ministros quemados" en los pasillos del Congreso y del Senado. En su análisis sobre el CIS, cargos populares citaron a Cristóbal Montoro y a Rafael Catalá, en el ojo del huracán en las últimas semanas. También se escuchó eso de que "hay ministros desaparecidos, a los que nadie conoce".
"El problema es la tendencia. Ciudadanos sigue disparado y nosotros caemos. Nos podemos consolar diciendo que somos los primeros, pero tal vez sea por poco tiempo", razonó un líder territorial. "Francamente, veo el panorama bastante negro", añadió, alejándose del discurso oficial del partido. "El calendario judicial no ayuda", recordó un alto cargo del PP, también bastante pesimista. En este sentido, desde la propia dirección nacional admitieron: "Hay que trabajar mucho para remontar esos resultados". Otra vez se estudian fórmulas para desgastar al partido naranja.