"Me encuentro muy bien, ¿no se me nota?". Mariano Rajoy quiso dejar claro en los tradicionales corrillos en el Congreso por el aniversario de la Carta Magna que no descarta presentarse de nuevo a las elecciones a pesar del acuerdo de investidura suscrito con Ciudadanos. "¿Qué debate es ese?", se preguntó. "No he hecho nada tan malo", añadió, no sin recalcar que está "muy tranquilo" ante el ascenso de Albert Rivera en las encuestas. No se plantea "otro escenario" que agotar la legislatura.
El jefe del Ejecutivo mantuvo una extensa conversación con los periodistas sin micrófonos encendidos. Su prioridad sigue siendo la mejoría económica, que cree que irá a más si la situación en Cataluña se tranquiliza. Sobre el resto de grandes retos mantiene una enorme cautela. Así, consideró "surrealista" el debate sobre la reforma de la Constitución, toda vez el PSOE no concreta su propuesta. No cierra la puerta pero una y otra vez mostró sus reservas. "No entiendo esa filosofía de hacernos los simpáticos con los que no lo son", arguyó.
También culpó a los socialistas del retraso sobre el nuevo modelo de financiación autonómica. Pese a lo prometido, el nuevo sistema no se aprobará antes de que concluya el año. "Yo con 137 diputados no puedo", se quejó. Susana Díaz, muy crítica, aseguró que en algún momento del acto trataría de hablar con él al respecto pero no se encontraron. En cuanto a los Presupuestos Generales del Estado, Rajoy se mostró mucho más optimista. "En enero" , repitió en varias ocasiones, no sin precisar que todo está ya prácticamente cerrado con el PNV.
Cataluña ocupó buena parte de la charla. Rajoy desdeñó los posibles planes de Carles Puigdemont. "Me trae sin cuidado lo que haga", contestó ante la posibilidad de que se presente en España en plena campaña electoral. Una vez más, rechazó comentar las decisiones judiciales pero recalcó que "ya seas un presidente o un conserje, estás sometido a la ley". Ante la pregunta de si prefiere a Miquel Iceta o a Inés Arrimadas al frente de la Generalitat, contestó: "Yo prefiero a Albiol". Cabe destacar que, tal y como avanzó este diario, la dirección nacional del PP ve hoy por hoy "más presidente" al candidato socialista.
El presidente no se mostró incómodo ni cuando los informadores le preguntaron por José María Aznar. "Me llevo muy bien con él como todo el mundo sabe", ironizó. "Yo solo me llevo mal con dos personas", remató, aunque no aclaró de quién se trata. Fue tajante cada vez que salía a colación su futuro político: se encuentra en plena forma y con ganas de repetir. "No hagamos quinielas".