Rajoy rechaza el plan de Iceta: "No participaré en una subasta de ideas"

No habrá una Hacienda catalana que recaude y gestione todos los impuestos. Es el compromiso del presidente del Gobierno, que defendió un modelo de financiación pactado entre todas las comunidades. A pesar de las críticas por la demora, Mariano Rajoy aseguró que ya se trabaja en este sentido aunque rehusó poner una fecha límite para las negociaciones. Y volvió a avisar a navegantes: "Aquí no se trata de resolver los problemas puntuales de cada uno".

El jefe del Ejecutivo no quiso chocar frontalmente con Miquel Iceta, a quien "respeta" por haber dado "una batalla que no era fácil" en Cataluña apoyando el artículo 155 de la Constitución. Si bien quiso dejar claro que "no" coincide con su plan económico. "En España tenemos muy claro cómo tiene que ser el modelo de financiación: hay que acordarlo entre todos", sostuvo, en una rueda de prensa en Abiyán (Costa de Marfil) tras participar en la cumbre Unión África-UE y visitar el patrullero Infanta Cristina, que se encuentra fondeado en su puerto.

En este contexto, fuentes del Gobierno destacaron que las críticas a las propuestas de Iceta están llegando incluso por parte de barones socialistas, como Susana Díaz o Guillermo Fernández Vara. "Sinceramente, no creo que estemos en estas elecciones para participar en una subasta de ideas", insistió Rajoy, que recordó que Cataluña optó por dejar vacía la silla en los grupos de trabajo para aprobar el nuevo modelo.

A partir de ahí, el presidente no se pilló los dedos. En teoría, la nueva fórmula de financiación tendría que estar lista para antes de que finalice el año, pero Íñigo Méndez de Vigo ya avisó de que será "imposible". "Tengo voluntad de hacerlo, pero tenemos que hacerlo al menos con el apoyo del PSOE", precisó el presidente, no sin poner encima de la mesa su minoría parlamentaria y que los socialistas controlan hoy buena parte de las comunidades autónomas.

El presidente no se puso plazos para la financiación y ni mucho menos para una hipotética reforma de la Constitución. De hecho, lo que hizo fue volver a mostrar públicamente sus reservas. "Lo importante es que se nos diga qué es lo que se quiere reformar", afirmó, en alusión al PSOE. Y de ahí, añadió, que no esté "en condiciones de decir si se podrá reformar esta legislatura". Tal y como informó este diario, el Grupo Popular se contentaría con retoques en leyes orgánicas.

El "absurdo" de Iglesias

Mucho más claro fue a la hora de hablar del artículo 155 después de que Podemos haya anunciado un recurso ante el Tribunal Constitucional. "Por lo visto, algunos lo que quieren es que no hagamos nada. Tamaño absurdo no tiene ningún sentido", contestó, preguntado expresamente por Pablo Iglesias. "Cada uno es libre de hacer lo que estime oportuno y conveniente, pero debo recordar que el artículo 155 es absolutamente democrático", subrayó.

Rajoy enfatizó que se tomó la decisión ante una situación excepcional, como fue el intento del Gobierno catalán de romper España. "Es lo menos que podíamos hacer", zanjó. "Ahora todo el mundo tiene claro que el Estado se puede defender y que cuando alguien lo ataca, actuará siempre, porque es su obligación", remató el jefe del Ejecutivo.