Al igual que hiciera el Gobierno la semana pasada, el Partido Popular intenta restar importancia al viaje que este martes emprenderá el presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, a Bruselas para explicar su proyecto independentista. Según explicó el portavoz del PP en el Parlamento europeo, Esteban González Pons, Puigdemont acude a Bruselas a título personal: "Es un acto particular en el que actuando como un particular ha alquilado un sala del parlamento europeo como podría haberlo hecho en un bar y va a reunir a los que quieran ir a verle para explicarles su referéndum".
El Partido Popular explica que la visita del líder catalán genera bastante "extrañeza" entre los miembros del Parlamento europeo porque no entienden cómo un presidente de una Comunidad Autónoma no utiliza un "cauce institucional" y en su lugar acude invitado por otros tres eurodiputados aceptando dar una conferencia en salas que normalmente se utilizan para dar cabida a ONG y a entidades que no tienen voz propia en Bruselas.
Así las cosas, desde el PP advierten de que aunque el presidente catalán pretenda hacer ver que el martes su conferencia ha sido un éxito, la realidad será bien diferente. "Por el hecho de que algo ocurra en el suelo de una institución europea no significa que tenga importancia", señalan. El propio González Pons quiso poner énfasis en este hecho en un encuentro con los periodistas en la sede nacional de la formación: aunque el acto tenga lugar "dentro" del Parlamento europeo no significa que sea un acto organizado por esta institución, insistió.
El apoyo de la extrema derecha
Además, el eurodiputado popular quiso hacer ver que en Bruselas "cada vez se entiende menos" la actitud de Puigdemont y los nacionalistas. Según González Pons, sus aspiraciones rupturistas se ven en las instituciones comunitarias como "un nuevo Brexit". Algo que, advirtió, cada vez ven con mejores ojos desde la extrema derecha de grupos como los de Nigel Farange o Marie Le Pen.
Para el dirigente popular, el movimiento independentista de Cataluña "cada vez tienen más aliento de la extrema derecha" porque ven "con alegría" como un nuevo órdago como el que plantea Reino Unido "ayudaría a romper un poco más" una Unión Europea que a su juicio no está pasando por su mejor momento.
Sea como sea, desde el PP aseguran que el martes no harán nada en Bruselas para intentar contrarrestar el acto de Puigdemont. En un principio, ni siquiera tienen previsto contestar a lo que diga el presidente catalán en su charla. Fuentes de la delegación europea señalan que no lo harán porque al no tener carácter institucional sería darle más importancia de la que realmente tiene.