La ofrenda floral en el monumento a Rafael Casanova, el símbolo del independentismo que animó a los catalanes a "derramar la sangre gloriosamente por el rey, por su honor, por la Patria y por la libertad de toda España", ha iniciado un año más los actos de celebración de la Diada catalana durante el 11 de septiembre.
Como ya ha ocurrido otros años, en el acto han faltado representantes tanto de Ciudadanos como del PP, mientras que sí ha habido una delegación del PSC encabezada por el propio Iceta.
En las habituales declaraciones a los periodistas tras la ofrenda que ha recogido Efe, el más contundente ha sido probablemente el presidente de ERC y vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, que ha vaticinado que la de este año será "la última Diada" antes de la independencia.
Junqueras, que ha estado acompañado por el portavoz de los republicanos en el Congreso, Gabriel Rufián, ha pronosticado que dentro de un año Cataluña será independiente y ha hecho un llamamiento a la participación en la movilización independentista de esta tarde en cinco ciudades de Cataluña y de la que ha pronosticado que "será un éxito extraordinario".
Forcadell y "las libertades de las instituciones"
Por su parte, la presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell, ha asegurado que "un motivo para salir a la calle esta Diada es para defender las libertades de las instituciones catalanas y de todos los ciudadanos, el derecho y la libertad de participación y de expresión".
Forcadell ha recalcado que, aunque la Diada conmemora la "lucha de los catalanes" que defendieron la ciudad de Barcelona frente a las tropas borbónicas en 1714, "lo que nos mueve masivamente es el anhelo de un futuro mejor". "No importa el origen ni la identidad heredada de los antepasados, lo único que importa es este deseo de futuro, todo el que quiera una Cataluña mejor debe conmemorar y vivir esta Diada", ha dicho.
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que también estará en la manifestación de esta tarde, ha señalado el carácter pacífico "pero también reivindicativo" de la movilización, por lo que ha pedido una "Diada masiva, democrática, de derechos y de libertades, desde la pluralidad y diversidad política".
Enfadados con Margallo
Finalmente, la coordinadora general de PDC, la nueva marca de la vieja Convergencia, Marta Pascal, ha encabezado la delegación de su partido junto a Artur Mas, y ha terciado en la polémica por las declaraciones de Margallo de las que también han hablado otros líderes nacionalistas.
El ministro de Asuntos Exteriores en funciones advirtió este sábado en un acto político en San Sebastián de que el "desafío soberanista" de Cataluña es el "más importante" que afronta España, ya que "de una crisis se sale, un ataque terrorista se supera, pero la disolución de España es absolutamente irreversible".
Para la dirigente independentista, "la frivolidad de Margallo llega a niveles insospechados" al hacer una "comparación absolutamente lamentable", dado que el proceso soberanista, ha incidido la dirigente del PDC, se está realizando por la "vía pacífica y democrática".