Mas ve una conspiración contra la nueva Convergencia: "Nos quieren destruir"

El ex presidente de la Generalidad Artur Mas reaparecía en una comparecencia pública para valorar junto a la plana mayor del que pretende llamarse Partido Democrático Catalán ( PDC) la pérdida del grupo propio en el Congreso y Senado por primera vez en 40 años. Lejos de admitir que legalmente no le correspondía este privilegio, Mas responsabilizaba de esta decisión a una especie de conspiración contra su nueva criatura política: "Nos quieren destruir", decía Mas,  "por una razón muy simple: el proceso separatista depende de que este partido tenga fuerza o no".

Presumiendo como el líder de "la fuerza central" del separatismo, Mas recordaba como en 2004 sus socios catalanes de ERC consiguieron grupo pese a no cumplir con los requisitos. "¿Por qué este trato diferencial?", se preguntaba el ex presidente que cree estar convencido de que todo se debe a un intento de silenciarles para eliminarles "tanto personal como políticamente". "No lo conseguirán", advertía el ex presidente.

Pero Mas no comparecía solo, lo hacía flanqueado por los suyos, entre ellos el portavoz de la todavía CDC en el Congreso Francesc Homs que en línea con el discurso del ex presidente también aprovechaba para denunciar una “operación sectaria” coordinada entre el Estado y diferentes partidos políticos para querer acabar con la nueva Convergencia y frenar así el proceso independentista. Recurriendo a su habitual victimismo, Francesc Homs decía que todo responde a una “aplicación política del reglamento del Congreso” para silenciarles. En este punto, Homs dirigía personalmente sus críticas contra el líder de Ciudadanos por haber sido el único partido que votó en contra del grupo propio. Rozando la amenaza, Homs advierte a Rivera que “si se pensaba que con esta maniobra nos iba a callar, que se olvide ¡porque nos va a oír!”.

Según Homs, al que en esta ocasión sí le conviene recurrir al cumplimiento de las leyes, que “esto sólo ocurre en las repúblicas bananeras”. A la vez, ha seguido con las amenazas hacia Rivera del que ha dicho que “no tiene ni puñetera idea de cómo funciona el Congreso de los Diputados”. El portavoz convergente concluía advirtiendo que “pese a que no contarán con 30 minutos para hablar como ellos (C’s), con 15 tendremos de sobra” sentenciaba.

ERC les deja tirados

Después de que el portavoz de la todavía CDC en el Congreso Francesc Homs y la coordinadora general del PDC Marta Pascal dejaran caer su intención de querer formar grupo junto a ERC para salvar así, al menos parte de la jugosa subvención que pierden automáticamente al pasar al grupo mixto, los de Oriol Junqueras respondían marcando distancia. Primero era el portavoz del partido en el Ayuntamiento de Barcelona Alfred Bosch quien en una entrevista en la emisora RAC1 decía que “ están dispuestos a ayudarles” aunque sin comprometerse a aceptar la petición de auxilio de CDC. Es más, Bosch les decía que también en el grupo mixto se pueden hacer muchas cosas.

Después ha sido el diputado de ERC en el Congreso, Joan Tardá, el que les ha dicho a socios de gobierno en Cataluña que mejor por separado: “Personalmente creo que es más rentable que existan diversas voces en el Congreso de carácter independentistas”. Añadía Tardá que de esta manera “se puede visualizar mejor el sentir mayoritario para construir el Estado catalán” marcando así distancia con un grupo al que ya dijeron “no” para presentarse juntos a las anteriores elecciones y con el que queda claro que en Madrid no quieren compartir bancada.