El sindicato de la policía autonómica (SAP), vinculado a la UGT, es el canal a través del cual los Mossos que custodian al presidente de la Generalidad, Carles Puigdemont, denuncian sus "penosas", "precarias" e "indignas" condiciones de trabajo cuando tienen que cubrir el servicio de vigilancia en la residencia "presidencial".
Desde que es presidente autonómico, Puigdemont vive en un chalet de la lujosa urbanización Golf Club Gerona, en la localidad de San Julián de Ramis. Pero los agentes de los Mossos no disfrutan precisamente de lujos. Por no tener, ni siquiera tienen "una dependencia donde poder realizar sus necesidades más básicas", subraya un comunicado de denuncia del sindicato. Están a las puertas del domicilio, sin garita y a la intemperie. En invierno lograron colocar una estufa a base de "malabarismos", dice la nota. Ahora, el calor es "dramático", se lamentan los policías.
En marzo se quejaron al departamento de salud laboral de los Mossos y se les prometió que el 15 de julio estaría todo arreglado. No ha sido así. Ahora, la fecha para la construcción de un módulo adosado al chalet es el 1 de agosto, según el departamento de Presidencia. Se trataría de una estructura no precisamente de Estado, como las que reivindica Puigdemont, sino desmontable.
Otras son las condiciones de trabajo de los escoltas de Artur Mas, que mantienen una reserva de aparcamientos delante del inmueble en el que vive. Además, la Generalidad abona el alquiler de un ático en el edificio para los agentes.