El líder del PSOE ha puesto las cartas boca arriba. Su aspiración tras las elecciones del 26 de junio es gobernar con Podemos, concretamente con "el ala blanda de Podemos" en donde ha ubicado al número dos de la formación de los círculos, Íñigo Errejón.
En el Foro El Mundo, Pedro Sánchez ha dejado claro que no tiene ninguna intención de permitir, con la abstención del PSOE, un gobierno del PP. "Ni me lo planteo", ha dicho tras su afirmación en Sitges de que "no habrá unas terceras elecciones". Y ha considerado algo propio de la "ciencia ficción" el escenario inverso porque "el PP nunca se abstendrá para que gobierne el PSOE".
Lejos de pensar en la vía del entendimiento entre los dos grandes partidos, lo que ha aclarado este martes es que volverá a intentar formar Gobierno si el PSOE queda segundo en los comicios y sin contar con el PP. Y en quien están pensando como futuro socio de Gobierno es en un Podemos que acabará cediendo a una presidencia socialista.
"Si yo gano, el ala moderada de Errejón se impondrá al ala dura de Monedero e Iglesias", ha afirmado tajante Sánchez verbalizando por primera vez los nombres de los dos bloques de la formación morada. Acto seguido, ha sido aún más explícito al situarse en el escenario posterior a los comicios y el inicio de las negociaciones:
"Si el planteamiento que hace Iglesias es el de sonreír al destino de haberme encontrado en mi camino, nombrarse vicepresidente y director del CNI y poco menos que nombrarme a mí presidente honorífico, ya le digo que no". Pero "si el planteamiento que hace Podemos es sobre las políticas, desde luego nos entenderemos", ha dicho.