El Gobierno ha concedido la nacionalidad española a varios opositores venezolanos, una decisión tomada este viernes y que el presidente en funciones explica en un duro artículo en El País publicado este sábado, en el que hace una directa denuncia de la situación en el país caribeño.
"No podemos ser indiferentes al drama humanitario, político y económico que están sufriendo todos los días en un país tan hermano", escribe Rajoy que, sin embargo, esta misma semana consentía que el embajador en Venezuela volviese al país, en un gesto claro diplomáticamente hablando.
Rajoy no tiene reparo en hablar del "preso político Leopoldo López" como "uno de los 85 presos políticos que hay en Venezuela" e incluso llega a asegurar que ha sido "injustamente condenado a casi 14 años de prisión por asistir a una manifestación". Incluso recuerda el presidente vergonzoso el episodio vivido por el padre de Leopoldo López en Asturias: "Es objeto del hostigamiento chavista incluso en España".
Aunque de pasada, Rajoy también comenta la relación entre el régimen chavista y el partido de Pablo Iglesias: "Ha sido en Venezuela, como asesores del Gobierno chavista, donde han ensayado su programa para España".
"Tenemos que apoyar expresamente a la prensa venezolana" asegura Rajoy, "como lo viene haciendo mi Gobierno" que también relata los problemas a los que personas relevantes en los medios de la oposición al chavismo han padecido.
Pero la parte más dura del artículo es, probablemente, el párrafo en el que Rajoy enumera alguno de "los padecimientos de los 28 millones de venezolanos" entre los que cita "los linchamientos por la inseguridad generalizada, los saqueos por la escasez crónica de medicinas y alimentos, la hiperinflación de más del 700% y el consiguiente desplome del poder adquisitivo y sufrimiento de los más pobres. El populismo –remata Rajoy– no ha generado más que desabastecimiento de todo, represión y violencia". "Todo lo que no queremos para Venezuela ni –hay que decirlo- para España", vuelve a apuntar Rajoy de nuevo sin citar a Podemos por su nombre.
Finalmente, el presidente promete seguir apoyando "a los venezolanos, a su prensa libre y a sus demócratas, en particular a la nueva Asamblea Nacional" y asegura que "ni España ni Europa podemos olvidar a los venezolanos" que "merecen un futuro mejor".