Rita Barberá ya ha rendido cuentas ante el Comité de Derechos y Garantías del PP. Lo hizo el pasado 3 de mayo, pero se ha mantenido en secreto hasta este martes. Fue Javier Maroto, muy crítico con la exalcaldesa de Valencia, quién lo confirmó ante los medios de comunicación al término de la reunión semanal de Mariano Rajoy con su cúpula. Si bien, no aclaró si se le suspenderá cautelarmente de militancia, como se da por descontado si finalmente es imputada.
La histórica dirigente del PP, que sigue siendo senadora, tuvo que declarar por el expediente informativo que le abrió Génova al verse implicada en un supuesto caso de blanqueo de dinero. Una cuestión que ha hecho un daño enorme a la formación, y de ahí que el propio Maroto volviera a pedir al comité interno que se dé prisa en sus deliberaciones. "Espero que se resuelva lo antes posible", subrayó en rueda de prensa. "El partido continuará con ese expediente para que sea lo más ágil posible", insistió en una segunda ocasión.
Previamente, Fernando Martínez Maíllo, vicesecretario de Organización e interlocutor directo de Barberá, ya había desvelado que se había producido el discreto encuentro con Barberá. "Teníamos muchas dudas de que fuera a presentarse", admitieron las fuentes consultadas a puerta cerrada. "El instructor del caso ha tomado declaración a todos los concejales ya y está tomando declaración en Valencia a los asesores", explicó el número tres en declaraciones a la Cadena SER. "Contundencia: el que la hace la paga", remató Maroto.