"Lo he escrito para que quede más claro y no haya malos entendidos. Ya he dado mi opinión sobre un deseo de cambio, que yo entiendo que debe hacerse desde un Gobierno de izquierdas. Ya está". Esas -y únicamente esas- han sido las palabras de Manuela Carmena, que este jueves por la tarde convocaba a la prensa a las 17.00 horas para aclarar unas declaraciones suyas que realizó horas antes junto a la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Purificación Causapié.
El revuelo causado por sus afirmaciones acerca de la sesión de investidura y los pactos ha sido de tal envergadura que la alcaldesa ha decidido no quedarse sólo con su comentario aclaratorio en Twitter y ha convocado a los periodistas para leer esas tres líneas escasas: de los 112 caracteres en la red social a los 180 del comunicado que llevaba escrito, incluyendo en ellos su explicación sobre la lectura del mismo.
Un gobierno fuerte y del cambio es un gobierno de coalición entre el PSOE y Podemos. Que nadie me malinterprete.
— Manuela Carmena (@ManuelaCarmena) 3 de marzo de 2016
Preguntada a las puertas del edificio de Medialab-Prado sobre si creía que se habían malinterpretado sus palabras de esta mañana, ha contestado que no y ha añadido que, "a veces, cuando desde la sociedad civil se intenta expresar la sensación que produce su trabajo (de los parlamentarios) y transmitirles ánimo y objetivos en estos momentos tan tensos e históricos, cada uno lo puede interpretar como quiera. Pero yo creo que es claro: me conocéis, me conocen y lo que yo deseo es que haya un Gobierno estable, un Gobierno fuerte que tiene que tener una alianza de izquierdas".
Desde Libertad Digital hemos querido conocer si la alcaldesa vería con buenos ojos que en ese Gobierno fuerte y estable pudiera participar -además del PSOE, Podemos y otras fuerzas de izquierda- Ciudadanos, única formación que a día de hoy ha llegado a un acuerdo con los socialistas y ha votado a favor de la candidatura de Pedro Sánchez. Carmena, sin salirse ni una coma de lo ya expuesto, ha respondido: "A mí me parece que lo importante es que se consiga que haya ese Gobierno estable con una alianza de izquierdas".
Pero, ¿qué es lo que había dicho entonces la alcaldesa junto a la socialista esta mañana? Algo no muy distinto a lo expuesto luego en sus dos aclaraciones; es decir, en ningún caso se había mostrado favorable a un pacto con la derecha, ni siquiera nombró a Ciudadanos. Pero sí dejó clara la necesidad de tener ya un Gobierno en España. Y es en ese punto donde dejaba muy comprometida la estrategia de Pablo Iglesias y los suyos, que han optado ya muy claramente por el bloqueo institucional al votar no -y anunciar su voto en contra para este viernes- a la investidura de Pedro Sánchez.
"Como ciudadana y también como alcaldesa creo que no es bueno que estemos sin gobierno, lo peor que nos puede pasar a la ciudadanía en general es que haya que repetirlas (las elecciones). Yo desearía con todas mis fuerzas que del próximo debate saliese un acuerdo con un Gobierno fuerte de cambio", dijo horas antes.
"Sería bonito que hubiese este apoyo a quien en este momento está solicitando la investidura. Creo que eso conformaría un gobierno de progreso, un gobierno de cambio", insistió. La alcaldesa destacó que, gracias a "otra manera" de hacer las cosas, en el Ayuntamiento de Madrid se había podido constituir un Ejecutivo que, aun siendo minoritario, había aprobado los presupuestos y ha seguido con una línea de trabajo constante. "¡Caramba!, que cojan ejemplo", animó.
Además, preguntada expresamente por qué le había parecido el duro discurso de Pablo Iglesias contra los socialistas [la cal viva de Felipe González, entre otras cuestiones], la alcaldesa contestó: "Yo no estoy por la confrontación".