Con tono tranquilo pero firme, la nueva líder de la oposición en Cataluña, Inés Arrimadas, ha asumido sus nuevas funciones como ariete contra el separatismo con solvencia, rotundidad y elocuencia. Sus primeras palabras han sido para recordar una frase pronunciada este mismo sábado por el todavía presidente en funciones, Artur Mas: "Lo que no hemos conseguido en las urnas, lo hemos corregido con la negociación". Para Arrimadas, Mas sabía que "si ponía las urnas, ponía en riesgo el proceso separatista".
En cuanto al candidato a la Presidencia, Carles Puigdemont, Inés Arrimadas ha sido tajante y definitiva al identificarle con Artur Mas: "Vamos a investir al señor Mas, al señor más de lo mismo", sentenciaba. En este sentido, para Arrimadas, la elección de Puigdemont es la prueba más clara de que Mas "no se va a casa", por eso "pone a una persona nombrada a dedo que es a imagen y semejanza de Mas".
Ya centrada en Puigdemont, Arrimadas ha lamentado que el próximo presidente de la Generalidad también tenga "una gran experiencia" en "utilizar las instituciones catalanas para ponerlas al servicio del independentismo" (como ha demostrado desde la alcaldía de Gerona y la presidencia de la Asociación de Municipios por la Independencia) y en "gastarse el dinero de todos los catalanes en fomentar la causa independentista". De nuevo, un motivo más para hablar de "más de lo mismo".
Además, Arrimadas ha recordado que la hemeroteca no deja lugar a dudas sobre el talante del próximo presidente al recordar algunas proclamas pronunciadas por el ya exalcalde de Gerona, como cuando dijo que "los invasores serán expulsados de Cataluña".
Corrupción
Arrimadas también ha puesto sobre la mesa uno de los principales problemas que sufre Cataluña, la corrupción. Un problema que representa "la segunda" preocupación de todos los catalanes. La líder de la oposición recordaba indignada a Puigdemont: "Para los catalanes, su principal problema no es ser español, sino que les roben sus representantes". Por eso, al venir "del mismo partido que el señor Mas", se ha comprometido a seguir denunciando los casos de corrupción y a seguir denunciando "el 3%", siempre que el Gobierno intente ocultarlo.
"Vamos a tener un presidente a dedo para un desafío ilegal que no cuenta con la mayoría de los catalanes y que está alejado de los problemas sociales", ha sentenciado Arrimadas. Y añadido: "Ya que tenemos un Gobierno que no habla de corrupción, necesitamos una oposición que hable de la corrupción".
'Cordón sanitario'
En este punto del discurso, la líder de Ciudadanos ha recordado que en el acuerdo que alcanzaron este sábado con la CUP se comprometían a hacer "un cordón sanitario contra todos los grupos de la oposición del Parlamento", lo que significa, "que ustedes van a hacer un cordón sanitario contra la mayoría de ciudadanos de Cataluña", ya que "Ciudadanos, Partido Socialista, Catalunya Sí Que Es Pot y Partido Popular tenemos más votos que Junts pel Sí y la CUP".
Chiringuitos
En otro de los capítulos de su discurso, Arrimadas ha sacado a relucir el dinero que el Gobierno de Convergencia ha gastado en estructuras dedicadas a la separación y a otros muchos "gastos superfluos". Unos "chiringuitos políticos" dedicados al proyecto separatista que gastan mucho dinero de los ciudadanos y que desde Ciudadanos van a reclamar que "se dediquen a lo que realmente importa". "Mientras tengamos un Gobierno dispuesto a gastar dinero en la independencia, vamos a tener una oposición que pida que se dedique el dinero a los ciudadanos", advirtió.
Precisamente, esta obsesión por la separación, por un proyecto que no aglutina a una mayoría de ciudadanos en Cataluña, impide al Ejecutivo catalán, sostuvo Arrimadas, negociar y pactar con el Gobierno central necesidades reales de Cataluña. "Hay reivindicaciones, como un mejor sistema de financiación", un debate que el Gobierno de Mas se ha negado a tener con el Gobierno central porque "decían que era imposible, sin embargo, decían que irían a negociar la independencia, ¿a quién pretenden engañar?".
El respeto a la ley
No podía faltar el capítulo del respeto a las leyes en el discurso de Arrimadas: "Un Gobierno que asfixia a los ciudadanos con impuestos no puede ser el primero en saltarse las leyes, tiene que ser el primero en cumplir las leyes; si se saltan las leyes, no pueden representar a ciudadanos que cumplen las leyes cada día".
Por otro lado, y recordando los problemas que generó en numerosos funcionarios públicos el desafío ilegal de la consulta del 9-N de 2014, Arrimadas ha advertido de que "no vamos a permitir que obliguen a funcionarios a incumplir las leyes. No les vamos a permitir que sus derivas políticas afecten a los miles de funcionarios que hay en Cataluña. Si no les protegen, les protegeremos nosotros".
Por todos estos motivos, ha dicho Arrimadas, Ciudadanos votará no a la investidura de Puigdemont, "porque no se puede estar de acuerdo en democracia con quienes quieren saltarse las leyes, la democracia y la justicia".
Réplica
En su réplica a Puigdemont, Arrimadas le ha espetado que "usted no me va a dar lecciones de democracia ni de condena del franquismo" porque "como sé lo que supuso la dictadura franquista -hizo alusión a familiares represaliados- no voy a permitir que ningún gobernante se piense que está por encima de la Ley y por encima de la Justicia".
Ha acusado al candidato a la presidencia de mentir por decir que cuentan con la mayoría de los catalanes para iniciar su proceso separatista: "Ustedes están mintiendo y sabe que están prometiendo cosas que no van a poder cumplir". Por último, recordó los casos de corrupción en Cataluña y lamentó que Puigdemont no haya querido mencionar una sola palabra sobre este asunto.
Albiol: "Ni usted ni nadie iniciará un proceso de ruptura"
El líder parlamentario del PPC, Xavier García Albiol, ha advertido Carles Puigdemont, que "ni usted ni nadie iniciará ningún proceso de ruptura de Cataluña con el resto de España". Albiol, que ha empleado el español y el catalán en su discurso, ha sido tajante en este punto y lo ha enfatizado dirigiéndose a Puigdemont: "Se lo digo mirándole a los ojos: ni usted ni nadie iniciará ningún proceso de ruptura". También ha prometido que el PP
El exalcalde de Badalona ha tirado de ironía al "reconocerle dos virtudes", "haber humillado a la CUP y que la CUP le haya humillado" a él, aunque ha lamentado que "el problema es que entre unos y otros han humillado al pueblo de Cataluña". En este sentido, Albiol ha dicho que Mas va a pasar a la historia por "haber dividido y fracturado a la sociedad catalana", ha dicho Albiol, que le ha reprochado que "no hay nada más antidemocrático que reconocer públicamente que se han corregido los resultados de las urnas a través de una negociación en despachos a puerta cerrada y a oscuras".
A su juicio, "la voluntad de los catalanes ha sido adulterada con pactos oscuros que tienen por objetivo imponer a los catalanes aquello que no ha decidido la mayoría de las urnas". Para el dirigente, Mas "deja el futuro de Cataluña en manos del radicalismo y no es consciente del terrible mal a la economía. Todas las consecuencias de la decadencia de Cataluña se sintetizan en una sola cosa: mal gobierno, el que usted ha presidido", ha concluido.
Réplica
En su réplica, García Albiol también ha recordado a Puigdemont que "no tienen la mayoría de la sociedad" para iniciar el proceso de ruptura, porque "es cierto que en esta cámara tienen mayoría, pero sólo tienen el apoyo del 48% de la población, el 52% no somos independentista". Por eso le ha pedido que "no hable en el nombre de todos". Ha lamentado que esté obligando "a la mayor parte de los catalanes a ser extranjeros en nuestro propio país".
También se ha referido al diputado de Junts pel Sí Jordi Turull para decirle que serán "todos los españoles" los que tienen que decidir sobre España, "porque si tiene que cambiar o variar este país no lo va a decidir sólo una parte en contra del resto". Finalmente ha advertido: "Tenga absolutamente claro que no se va a permitir que mientras esté gobernando el PP nadie va a llevar a cabo un referéndum de secesión de una parte del territorio contra el resto".
Iceta: "No a la independencia, a la ilegalidad y a su investidura"
Por su parte, el líder del PSC, Miquel Iceta, ha tomado la palabra para explicar que el PSC dirá "no a la independencia, no a la ilegalidad y no a su investidura", dirigiéndose a Carles Puigdemont. Así, ha explicado el rechazo de los socialistas al nuevo gobierno de la Generalidad a quien, sin embargo ha pedido que gobierne "para todos los catalanes" y le ha reprochado que se haya "subastado" la Presidencia catalana. La triple negativa de Iceta coincide con los tres noes que también dirigió a Mas cuando éste fue candidato a la investidura.
Para Iceta, las "formas" con las que se ha convocado este pleno de investidura en el último día del plazo permitido, no han sido correctas y ha señalado que Cataluña necesita "estabilidad, buen gobierno y capacidad de negociar", algo que a su juicio la propuesta de Puigdemont "no garantiza".
Iceta ha pedido a Puigdemont que su presidencia "no esconda el viejo demonio de la política catalana de separar entre buenos y malos catalanes", y le ha preguntado si su gobierno tendrá como "base" y "plan de gobierno" el acuerdo para la independencia que Junts pel Sí planteó a la CUP para lograr la investidura de Mas.
Rabell: CDC busca rehacerse
El presidente del grupo de Catalunya Sí Que es Pot (CSQEP), Lluís Rabell, ha afirmado que la investidura del nuevo candidato a la presidencia de la Generalidad, Carles Puigdemont, "tiene como finalidad dar tiempo a que CDC se rehaga" sin perder "los resortes del poder". Por otro lado, ha pedido "una gran alianza por el cambio" como alternativa al Ejecutivo de Junts pel Sí y la CUP.
Quizá en el punto en que Rabell puso más énfasis fue cuando dijo que "no tiene la valentía de decir la verdad, y es que el plebiscito no se ganó, tiene un mandato para hacer un gobierno pero no para tirar adelante un plan unilateral" de avance hacia la independencia, decía. A la CUP le ha dicho que su apoyo a la investidura "parece producirse a cambio de nada", o "quizás a cambio de la ilusión de impulsar un proceso que es irrealizable y planteado con medidas unilaterales". "No creemos que tenga lugar la desconexión, porque no hay suficiente legitimidad democrática y esto no se resuelve con juegos de aritmética parlamentaria", ha añadido Lluís Rabell.