Nunca han reconocido tener trackings internos, pero la seguridad con que afirman desde hace dos semanas que "todas las encuestas se equivocan" y que "somos la primera fuerza" ha hecho levantar las sospechas de si hay algún dato sólido que permita sostener tal optimismo, y tan alejado de la realidad demoscópica.
Preguntados por la existencia de esas encuestas internas, los socialistas no responden, pero las fuentes consultadas dejan caer que "un partido como el PSOE no se presenta a unas generales sin tener algo". Ese 'algo' tiene cifras que presentan en forma de quinielas sin confirmar el enigma de la existencia de datos propios.
Según las fuentes de la dirección federal consultadas por Libertad Digital, el PSOE cuenta con ser la primera fuerza con un bajo porcentaje, 24%, y por escaso margen sobre el PP. Y se atreven incluso a hacer una traslación de escaños en la horquilla de 108/113 para el PSOE frente a los 103 del PP.
Sean datos o sólo deseos, los socialistas aseguran que "el PSOE se está empezando a recuperar", que "hay un repunte" tras unos días "de bajón de moral" tras el debate a cuatro en el que muchos dieron por vencedor a Pablo Iglesias, el líder de Podemos sobre el candidato socialista.
Las fuentes consultadas auguran que habrá otro repunte porque habrá otro bajón: "Este fin de semana las encuestas serán malas para nosotros". No en vano, las últimas de este viernes, ya sitúan al PSOE en la cuarta posición por detrás incluso de Podemos. Lejos de la dirección, el panorama no es tan esperanzador.
Entre las baronías, circunscripción a circunscripción, los socialistas se pasean con caras largas oliendo el panorama del 21 de diciembre. "Vamos muy mal", reconocía en Toledo a LD un veterano dirigente para quien "Iglesias se comió a Pedro" en el último debate y ahora "le queda su última bala" el lunes que viene con Rajoy. "Si no gana, será la estocada final" del candidato que parte con los peores presagios en la historia del PSOE.
Pero el equipo de Sánchez está en una burbuja en la que destacan el hecho de que Pedro Sánchez "no está cometiendo fallos" en esta campaña frente a Abert Rivera con su marcha atrás sobre la Ley de la Violencia de Genero, y Mariano Rajoy con su consideración de que el cobro de comisiones por un diputado del PP y el embajador en la India es "normal". Tienen, además, buenas vibraciones sobre el pulso de la calle: "Fijaos que nosotros somos los que corremos más riesgos en actos como el de la plaza de Callao y nunca nos han abucheado", dicen incidiendo en que Rivera ya ha sufrido dos abucheos en la calle e "Iglesias evita las masas porque le dan miedo y le agobian".