Arropado por varios de sus compañeros de Unió en el Congreso de los Diputados como Josep Sánchez Llibre, Josep Antoni Duran i Lleida ha protagonizado este martes un desayuno informativo en Madrid para presentarse como el "único exponente del catalanismo político que no busca la ruptura" con España sino una solución basada en el diálogo y el consenso.
Aunque rechaza la figura de "mediador" Duran cree que, llegados a este punto, "es el momento de dar la cara" y él "está dispuesto a que se la rompan". Considera que "estamos ante una especie de subasta de patriotismo de un lado y de otro" que evita poder frenar las aspiraciones de los separatistas desde el gobierno central. La clave está en un punto intermedio, considera el exsocio político de Artur Mas que, en los días decisivos para cerrar un posible acuerdo de investidura, ya no ve tan imposible que la "CUP pueda investir" al líder convergente.
Un escenario que agravaría más la situación, reconoce, desde el punto de vista social y principalmente económico. Admite que si él fuera empresario "no invertiría en un país gobernado por la CUP" o cuyo Ejecutivo estuviera "condicionado" por esa fuerza política. Dice Duran que "construir un nuevo sistema con un partido antisistema" genera más incertidumbre y miedo.
A este respecto añade que "es de sentido común pensar que el dinero busca estabilidad" y la "resolución del 9N ha hecho un daño que es irreparable" por lo que dice entender que algunas empresas quieran abandonar Cataluña aunque no cree "que sean tantas decenas" como se publica.
Dejaría su cargo de no obtener escaños el 20-D
Pese a lo que dicen las últimas encuestas, el candidato de Unió confía en obtener representación parlamentaria en las elecciones generales del próximo 20 de diciembre. De no ocurrir así, confirma que dejaría su cargo, aunque no de ser diputado, para "dejar paso definitivamente a otros".
Un escenario en el que, confiesa, prefiere no pensar porque le gustaría "servir por última vez a Cataluña, España y Europa" y porque dice estar convencido de que la solución a lo que ocurre en Cataluña está en el Congreso de los Diputados donde pretende continuar al menos, una legislatura más.