Acto de aprobación del programa electoral que comenzaba con el recuerdo emocionado del socialista Ernest LLuch, asesinado hace hoy 15 años por la banda terrorista ETA. Él es, ha dicho Sánchez, quien "nos alienta para luchar contra la amenaza del terrorismo yihadista" al que "venceremos como al terrorismo etarra". Ahora bien, de la solidaridad con los atentados de París y las proclamas contra el terrorismo ha pasado a utilizar el terrorismo en la campaña electoral como ariete contra el PP y Ciudadanos, "la vieja y la nueva derecha" con quienes suscribe el pacto antiterrorista.
"El cambio no vendrá de la foto de las Azores, ni de quien quiere desplegar tropas en Siria", dijo en referencia al PP de Aznar y a Albert Rivera, el líder de Ciudadanos que se muestra favorable a intervenir militarmente en Siria bajo el amparo de una colaición internacional de la OTAN.
En el centro Conde Duque de Madrid, acompañado de su equipo de expertos pero con la ausencia de todos los barones del PSOE, el secretario general del PSOE rompió el discurso de la unidad con Mariano Rajoy de las últimas semanas pasando al ataque contra un presidente del Gobierno a quien ha reprochado "sus mentiras", desde la reforma laboral, el rescate financiero o las relacionadas con la corrupción de Bárcenas y "las reuniones secretas con Rato".
Argumentos que utilizó para recuperar el eslogan electoral de Alfredo Pérez Rubalcaba en 2004, también utilizando el terrorismo en campaña, "los españoles se merecen un Gobierno que no les mienta".
Con la mente puesta en las encuestas que sitúan al PSOE como tercera fuerza por detrás del PP y Ciudadanos, Sánchez desafío la realidad demoscópica pidiendo "aire fresco" en la presidencia del Gobierno una "mayoría progresista" con "un voto más que Rajoy". "Me atrevo a pediros una mayoría progresista. Tan solo necesitamos una cosa el próximo 20 de diciembre: un voto más que el partido de Rajoy. Es posible. Podemos hacerlo. Nosotros lo lograremos".
Un acto que ha aprobado finalmente el programa electoral del PSOE centrado en "5 promesas para los 5 primeros consejos": derogar la reforma laboral, un pacto educativo, otro contra la pobreza y la promesa de un ingreso mínimo vital; un pacto contra la violencia de género y el último: la apertura de la ponencia para la reforma constitucional. Mensaje aquí también de campaña con la vista puesta en Cataluña y mención velada para Artur Mas. "No renunciamos a la firmeza de la ley pero tampoco al diálogo y a la solucion política", aunque "no hay nada que hablar con quien se sitúa fuera de la ley".