Llamativo ha sido el relativo a la bajada de impuestos, el tramo autonómico del IRPF, anunciado por Juan Marín a bombo y platillo como el gran logro de su partido por su acuerdo con el PSOE. El problema es que no tenía ni idea de lo que estaba hablando porque se equivocó en todos los tramos y el PSOE ha autorizado en realidad una leve bajada que apenas supondrá 82 euros al año para un contribuyente con dos hijos que ingrese al año 20.000 euros. Ni para llenar dos veces el depósito de combustible del coche.
El otro sapo, de gran calado, ha sido la nueva manipulación por parte de su presidente Juan Pablo Durán, del PSOE, de la Mesa del Parlamento para impedir, otra vez, el debate de la disminución del Impuesto de Sucesiones propuesta por el PP y la transparencia de las cuentas públicas propuesta por Podemos. Y eso a pesar de que Ciudadanos anunció que rectificaría y aceptaría debatir las propuestas de la oposición.
Marín se hizo un lío con las tablas del IRPF
Lo del IRPF ha sido de traca, porque Ciudadanos ha anunciado una bajada mucho mayor porque su líder, Juan Marín, se equivocó al interpretar el acuerdo y fue incapaz de detallarlo Marín ha confundido, tramo a tramo, el número de contribuyentes beneficiados con el dinero que se devolverá a los bolsillos de los andaluces.
La "plancha" de Juan Marín ha sido mayúscula porque anunció que los que cobran menos de 12.450 euros al año, se les devolverían 1.400 euros en 2016; a los que ingresan hasta 20.200 euros anuales, 700; a quienes perciben hasta 35.200, 500; y a los que cobran hasta 60.000, 350.
El problema es que se equivocó al interpretar los cuadros que le pasó el PSOE. En realidad, el cuadro se refiere a que 1.400.000 andaluces cobran menos de 12.450 euros, que 700.000 cobran hasta 20.200, que 500.000 cobran entre 20.200 y 35.200 y que, finalmente, 350.000 cobran hasta 60.000 euros. Esto es, Marín confundió las cifras de cotizantes y sus ceros con el ahorro por la rebaja. En realidad, al contribuyente sin hijos que gane 13.000 euros le supondrá 138 euros el año que viene sólo en el tramo autonómico. Y como ya hemos dicho, el contribuyente con dos hijos que gane 20.000 euros, tendrá un ahorro de 82 euros.
Hasta el PSOE se ha reído porque, como subraya El Mundo, de ser cierto lo que anunció, la bajada equivaldría al 9,5 por ciento del total del presupuesto andaluz. Y tanto C's como el PSOE tenían los mismos papeles, según subrayaron desde la sede socialista.
El PSOE sigue manipulando la Mesa
La Mesa del Parlamento andaluz fue motivo de polémica desde el principio porque PSOE, con el apoyo de Ciudadanos, Podemos e IU, logró quitarle un puesto al PP, lo que dejaba el órgano de gestión institucional básicamente en sus manos. Pero cuando no tiene la mayoría hace que su presidente, el socialista cordobés Juan Pablo Durán, haga lo que le venga en gana con tal de que su partido se lleve el gato al agua.
El PSOE, en alianza con Ciudadanos, había impedido el debate de dos propuestas importantes de la oposición: la disminución, eliminación casi, del Impuesto de Sucesiones y Donaciones propuesta por el PP y la transparencia pública de las cuentas de la Junta, propuesta por Podemos. Ambas son proyectos de ley pendientes de tramitación, lo que de nuevo se ha impedido.
A pesar de que Ciudadanos aceptó rectificar tras un informe del Letrado de la Cámara advirtiendo al PSOE de su actitud, el presidente del Parlamento sorprendió ayer a todos los grupos con una nueva pirueta que retrasa bastante la tramitación de ambos proyectos. ¿El método? Decidir por su cuenta y riesgo que tales proyectos necesitan más documentación para poder ser admitidos. Sorprende que la nueva fórmula aprobada ayer tiene carácter retroactivo y afecta a estos dos proyectos presentados mucho antes. Ahora, deberán acompañar - la lista es de ABC-, una exposición de motivos para explicar las razones del cambio normativo, glosar sus principales innovaciones en un informe jurídico, un cálculo estimado del coste económico que supondría su aprobación y un informe del Consejo Consultivo que preside otro socialista.
La decisión del Presidente es, de hecho, una reforma encubierta del Reglamento del Parlamento que hace que las propuestas de un diputado o partido tengan más trabas que las presentadas por cualquier ciudadano. Ciudadanos votó en contra pero es evidente que su influencia sobre el PSOE, de nuevo, ha sido nula.
El escándalo ha llegado a tal punto que Juan Manuel Moreno, presidente del PP, anunció que presentarán una iniciativa para reprobar al presidente del Parlamento por sectarismo y atropello de la democracia. Ya había anunciado un recurso ante el Tribunal Constitucional.