Las fiestas de La Mercè en Barcelona se convirtieron este jueves en una nueva ocasión de los separatistas catalanes para mostrar su desprecio por España y los símbolos españoles. El concejal de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Alfred Bosch, sacaba en el balcón del consistorio una bandera separatista que colgaba del mismo ante la algarabía de los separatistas que jaleaban en la plaza. Al verlo, el concejal del PP Alberto Fernández Díaz pedía que se retirase la bandera separatista. Ante la negativa de Bosch y la pasividad del equipo de Gobierno, Fernández Díaz decidió coger una bandera española y colgarla también del balcón. Logró hacerlo, pero no sin forcejear con el concejal de Podemos en el Ayuntamiento Gerardo Pisarello, quien intentó evitar por la fuerza que Fernández Díaz colgara la bandera nacional.
Este ataque a la bandera de España y a los símbolos nacionales no estuvo exento de tensión y de gestos. El actor Juanjo Puigcorbé gesticulaba divertido detrás de Fernández Díaz, según se puede ver en los vídeos que recogen el momento. Además, el presidente de la Generalidad, henchido de satisfacción, exhibía la misma sonrisa que ya le vimos en el palco del Camp Nou durante la final de la copa del Rey cuando los separatistas que acudieron al encuentro propinaron una histórica pitada al himno español en presencia del Rey Felipe VI.
Este incidente, el de la bandera en el balcón, ha sido este viernes portada en todos los periódicos de tirada nacional (menos en El País). Las reacciones políticas no se han hecho esperar y aquí ha llegado la sorpresa. A excepción del PP -que ha respaldado a Fernández Díaz por su defensa de la enseña nacional-, la mayor parte de partidos y candidatos han tratado de evitar dar su apoyo a la bandera de España.
Ciudadanos
La candidata de Ciudadanos se ha pronunciado sobre el ataque a la bandera. Lo ha hecho después de que los periodistas insistieran en la pregunta. Inés Arrimadas ha señalado que "a nosotros no nos han gustado nada las imágenes que vimos ayer, es la muestra de lo que se puede instrumentalizar un ayuntamiento. Cuando nosotros gobernemos las banderas estarán colgadas, las de verdad, las que nos representan a todos, donde tienen que estar colgadas".
Preguntada por si hubiese actuado igual que el portavoz del PP en la Ciudad Condal, Alberto Fernández, que trató de exhibir la bandera nacional en el balcón, Arrimadas ha contestado: "Nosotros, cuando gobernemos, las banderas constitucionales van a estar colgadas de donde tienen que colgar". No obstante, no ha querido defender al edil popular y se ha desmarcado del intento de Alberto Fernández Díaz por defender los símbolos nacionales, tachando su actitud de utilitarista. Decía Arrimadas que "no vamos a hacer un uso de banderas porque, además, nosotros lo que queremos es centrarnos en la gente, no en las banderas".
De forma parecida se expresó este mismo jueves por la noche la concejala de Ciudadanos en el consistorio de la Ciudad Condal. Carina Mejías se manifestaba públicamente y hablaba de "guerra de banderas" y decía que "la cohesión social y la respuesta a los verdaderos problemas de los ciudadanos no van a llegar por los extremos, sino desde la centralidad, que representa Ciudadanos".
"La Mercè es una fiesta de todos los barceloneses, donde todo el mundo se tiene que sentir llamado a participar, respetando los símbolos y la pluralidad ideológica del consistorio", añadió.
En su perfil de Twitter, dejó el siguiente comentario: "Dos concejales tirando de los extremos de la bandera de España. La solución está de (sic) la centralidad política. Cohesión". Al poco, eliminó el tuit, cosa que no pasó desapercibida para el PP de Cataluña, que lo rescató: "Hola, Carina Mejías. ¿Has perdido este tuit criticándonos por defender la bandera de España? Aquí te lo dejamos".
Pedro Sánchez e Iceta
Desde la candidatura socialista, Miquel Iceta se ha referido al ataque a la bandera nacional como "guerra de banderas" y, lejos de apoyar a Fernández Díaz, ha mantenido la equidistancia limitándose a decir que el 27S está en juego "guerras de banderas durante cuatro años más" o bien "soluciones" como su propuesta federal para "resolver" el encaje de Cataluña en la Constitución.
Es más, lejos de mostrar un claro apoyo a la bandera nacional, Iceta describió el asalto a la bandera española como "un espectáculo lamentable, con todos los protagonistas de un espectáculo lamentable. Partidos tirándose las banderas unos a otros y unas autoridades, el presidente Artur Mas y la alcaldesa Ada Colau, que se lo miraban entre divertidos y asombrados", ha dicho. Para Iceta, "lo que debe presidir es el respeto", y lo que sucedió en el balcón del Ayuntamiento no fue un ataque a los símbolos nacionales españoles, sino la "utilización de símbolos unos contra otros".
Por su parte, Pedro Sánchez tampoco ha querido mostrar su apoyo a Fernández Díaz o a la bandera de España y ha dicho que "no creo que el problema de Cataluña sea España ni el de España sea Cataluña. Hay malos gobernantes, y el 27S tenemos que dejarlos atrás y decirles adiós, y apostar y construir una Cataluña mejor en una España diferente".
Artur Mas
Con sorna, y después de haber asistido al asalto a la bandera de España entre risas, Artur Mas decía que "lo que nos interesa son las banderas de la igualdad y de la justicia social. Cualquier otra bandera, incluida la española, tiene todo mi respeto y consideración, soy muy respetuoso con lo que la gente ama y tengo muchos amigos con un vínculo emocional muy fuerte con España".
Pablo Iglesias y Rabell
El líder de Podemos no podía ser menos y también ha querido meterse en esta polémica. Eso sí, ni apoyo a la bandera de España ni mucho menos a Alberto Fernández Díaz. Para Pablo Iglesias, quienes estuvieron en su sitio fueron Alfred Bosch -a quien elogia por pedir disculpas-, y Gerardo Pisarello, quien trató por todos los medios de que el edil popular no pusiera la bandera de España en el balcón del Ayuntamiento. Dice iglesias que "sintió una sensación paradójica". "Fue ver a Gerardo Pisarello, alguien que viene de los movimientos sociales, tener una cosa que se llama respeto institucional".
El candidato podemita Lluís Rabell ha ido más allá al considerar que las disculpas del líder de ERC, Alfred Bosch, demuestran que es un demócrata, algo que ha comparado con la actitud del ministro de Interior, Jorge Fernández -quien ha dicho que el episodio vivido en el balcón del ayuntamiento de Barcelona le recordaban a los espectáculos de los batasunos en las fiestas populares en el país vasco colgando símbolos etarras-, de quien ha dicho que intenta "envenenar" la situación.
García Albiol
El único que ha defendido a Fernández Díaz y la bandera de España sin tapujos ha sido el candidato popular, Xavier García Albiol -de no haberlo hecho, probablemente hubiera tenido un problema-. El candidato del PPC ha aplaudido a Alberto Fernández Díaz. "Se ha acabado la broma. Ha llegado el momento de plantarles cara", ha asegurado Albiol en referencia al "acto de valentía" de Fernández Díaz por sacar una bandera española para exhibirla también ante el balcón consistorial.