Este jueves, el presidente de la Generalidad asistía divertido y satisfecho al momento de tensión que se ha vivido en el balcón del Ayuntamiento de Barcelona, cuando el concejal del PP Alberto Fernández Díaz ha tratado de desplegar una bandera de España como respuesta a los concejales de Esquerra Republicana, que han hecho lo propio con una bandera separatista.
Tal y como ha comentado en En Casa de Herrero el propio Fernández Díaz, han sido momentos de tensión en los que el concejal de Ada Colau, Gerardo Pisarello, ha tratado de evitar por la fuerza que Fernández Díaz hiciera ondear la enseña nacional.
Junto a ellos, apoyado en el balcón, Artur Mas sonreía satisfecho. Una mueca, la de Mas, idéntica a la que exhibió en la pasada final de la Copa del Rey, junto al monarca Felipe VI, cuando el estadio del Fútbol Club Barcelona -que acogió la final- propinó una sonora pitada al himno de España.
A sólo tres días de los comicios autonómicos en Cataluña, y sólo unas horas después del episodio vivido en el balcón del Ayuntamiento de Barcelona, el presidente Mas ha pedido a sus seguidores en un mitin que sean "un pueblo en pie" con la "voluntad firme" de avanzar hacia la independencia.
Desde su candidatura, Juntos por el Sí, ya se produjeron llamamientos a la desobediencia civil tras la manifestación separatista de la Diada, el pasado día 11 de septiembre.