La Diada envalentona a los separatistas que ya plantean actos de desobediencia

La campaña electoral en Cataluña consume su segundo día marcado por la Diada . Artur Mas sólo tardó unos minutos en capitalizar la manifestación para pedir desde TV3 que dejen de amenazarle. Este sábado también se quejaba, esta vez de que le acusen de politizar el Día de Cataluña. Dice Artur Mas que "no había ningún tipo de manipulación, orientación, desviación" en la manifestación de la Diada y que "es tramposo presentarlo así". Quizá sea preciso recordar que el 11 de septiembre se celebra el día de Cataluña, no el día de los separatistas catalanes.

Dejando a un lado el debate sobre las cifras de asistencia (menor a la de otros años) la manifestación de este viernes en la Meridiana de Barcelona no se puede calificar precisamente de Fracaso. El propio Albert Rivera lo reconocía públicamente en un mitin en Gerona junto a su candidata para la Generalidad, Inés Arrimadas. Dijo y remarcó rivera que a la manifestación fue "mucha gente". Además, fuentes del entorno de la lista única destacan que su optimismo va en aumento merced a las encuestas internas que maneja la formación. Podrían sacar, por sí mismos alrededor de 64 escaños (a 4 de la mayoría absoluta), lo que -con un más que esperado apoyo de las CUP- significaría ganar la Generalidad.

Desobediencia civil

Así, con las encuestas de cara y la meridiana a reventar de gritos de Independencia, todos los resortes de Artur Mas para las elecciones funcionan a pleno rendimiento. Desde la ANC -plataforma que a sueldo de la Generalidad que se integra en la candidatura de Juntos por el sí- ya han comenzado a hablar de desobediencia civil. En declaraciones a Catalunya Radio, su presidente, Jordi Sánchez decía que desde la ANC no dudarán en amparar actos de desobediencia civil "si son necesarios". Como ejemplo de este tipo de actos proponía que los catalanes dejen de pagar impuestos al Estado y comiencen a darles el dinero a ellos, a "una Agencia Tributaria catalana" porque "será un acto de soberanía que este país tendrá que hacer en algún momento de su trayecto hacia la independencia".

Las insinuaciones que llegaban desde la otra gran plataforma de ruptura, Òmnium Cultural, van en la misma dirección: "Quizá las manifestaciones que sean necesario hacer a partir de ahora sean de otro tipo, pero no por la Diada".

C's, PP, PSOE y Podemos

Mientras, el resto de partidos sigue sus agendas y caravanas electorales. Rivera se fue a Gerona, la provincia más separatista, para pedir a los suyos que sean "valientes" porque, aunque en la Diada hubo "mucha gente", más habrá "en las urnas el 27S y es allí donde nos manifestaremos los que queremos seguir siendo españoles y europeos".

Por su parte, Xavier García Albiol se rodeaba de líderes del PP y barones autonómicos para proclamarse garantía de la "unidad plural" de España. Desde la sala Martí l'Humà del Museo de Historia de Barcelona, García Albiol ha presentado lo que han llamado "Declaración de barcelona del PP" en la que los líderes populares proclaman que "somos catalanes, nos sentimos españoles y europeos y nadie tiene derecho alguno a obligarnos a renunciar a nuestra identidad".

En el mismo acto, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha sido aún más tajante y explícita al referirse a la manifestación como "ese espectáculo vergonzoso" que refleja "el gobierno" que ha tenido Cataluña en los últimos años, "un Gobierno corrupto, sectario, que gobierna solamente para unos pocos".

Después del acto de partido, García Albiol se ha acercado hasta Cornellá El Prat para ver el partido Espanyol-Real Madrid (que ha terminado con una goleada del equipo blanco sobre los albiazules). Al llegar a la grada, Albiol publicaba un mensaje en redes sociales: "con una hipotética Catalunya independentie, partidos como este estarían en riesgo"

En el RCD Espanyol - Real Madrid. Con una hipotética Catalunya independiente, partidos como este estarían en riesgo pic.twitter.com/Ok8EEeR1yV

— Xavier García Albiol (@Albiol_XG) septiembre 12, 2015

Además, añadía que "Este partido de fútbol, este ambiente, yo creo que es la evidencia de que romper no nos interesa a nadie". Luego tuvo que pedir apoyo para digerir la derrota de su equipo.

Desde el PSOE, entre baile y baile del candidato a la Generalidad Miquel Iceta, el secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, advertía a "la clase media trabajadora" catalana de los "enormes costes" que tendría la ruptura. Cargó contra Mas y también contra Rajoy por ser "un fraude" y por "esconderse para no hacer balance de sus gobiernos".

Por último, desde Podemos, el candidato de Cataluña Sí que Puede, Lluís Rabell, ponía la manifestación de la Diada como ejemplo de democracia y cargaba contra el PP: "hubo ayer más democracia en las calles de Barcelona que en la boca de los señores del PP".