El Ayuntamiento de Barcelona fomentará las delaciones entre turistas y vecinos para intentar acabar con los pisos turísticos sin licencia. Esta es la principal conclusión del grupo municipal de Ciudadanos, dirigido por Carina Mejías, quien en una comparecencia ante los medios ha criticado que "el gobierno de Barcelona en Común obligue a los ciudadanos a desarrollar una labor social que corresponde al Ayuntamiento". Mejías también ha arremetido contra el equipo de gobierno municipal por "chantajear" a los propietarios de viviendas, a quienes se condonará una parte de las sanciones si destinan las viviendas a programas urgentes de alquiler social.
Carina Mejías: "Sólo les falta ofrecer recompensa"
"Barcelona en Común -añadió Mejías- es heredera de gobiernos progresistas que no han generado un parque de viviendas sociales como se ha hecho en otras ciudades de Europa". La presidenta del grupo municipal de Ciudadanos ha criticado también que Colau pretenda que los turistas "delaten a los propietarios de los pisos ilegales". "Sólo les falta ofrecer recompensa" añadió. "Se trata de medidas propias de países totalitarios".
Por su parte, el presidente del grupo municipal del PP, Alberto Fernández ha apuntado que "hace ya tres meses que pasaron las elecciones municipales, y ahora en pleno mes de agosto y en el ecuador de la campaña estival, se anuncian unas medidas que el Gobierno no fue capaz ni siquiera de trasladarlas en el pleno del pasado 24 de julio". Para Alberto Fernández, "en la lucha contra los apartamentos turísticos irregulares se requiere ley, sanciones, inspecciones, y Guardia Urbana" y ha añadido que "hasta ahora Colau ha sido incapaz de hacer cumplir ninguna ley".
Alberto Fernández: Medida coactiva e ineficaz
"La medida -apunta Fernández- de condonar sanciones a apartamentos ilegales por convertirlos en pisos sociales es coactiva e ineficaz y lo que en realidad pretende el gobierno municipal es silenciar su incapacidad para promover un parque social de vivienda de alquiler en Barcelona, que es su obligación y no pueden intentar eludirla". Alberto Fernández ve "un mal chantaje condonar deudas por conversión de pisos sociales, porque además de ser una actuación cuestionable legalmente, los propietarios en un plazo mínimo de tiempo tendrán más rentabilidad poniendo el piso en el mercado".
Ciudadanos y el PP, con cinco y tres concejales respectivamente, son los únicos partidos que han criticado la polémica medida. Ni el PSC ni ERC, teóricos aliados de los podemitas en Barcelona, ni CiU se han manifestado respecto a la idea de pedir a los turistas y vecinos que delaten a los propietarios.