Mariano Rajoy se muestra confiado. Reconoce que ha estado alejado del partido, que hay que ponerlo a punto para las generales, pero está seguro de que repetirá en la Moncloa. Así lo percibieron los integrantes del nuevo Comité de Dirección, que celebró el miércoles la primera de sus reuniones.
Pese a las consecuencias de la hecatombe electoral, la nueva dirección observó a un Rajoy tranquilo. "Aunque a veces parezca que no, lo controla todo", según el relato de uno de los vicesecretarios. Por ejemplo, en materia de redes sociales, donde todo se mueve a velocidad vertiginosa para desesperación de Génova y la Moncloa.
Tanto en el Comité, como también en encuentros más informales con empresarios y altos cargos del partido, Rajoy no atisba otro escenario que el de una victoria clara del PP en las generales. "Está convencido de que el partido sale a ganar con ilusión, ideas y equipos", fue lo primero que dijo Pablo Casado al término del despacho, que se celebró en la planta noble de la sede nacional como ocurría en época de oposición.
No todos comparten su percepción. Más al contrario, importantes estructuras regionales y locales muestran su frustración desde la pérdida de poder institucional. Existe mucho ruido interno, aunque los barones han vuelto a guardar silencio tras reunirse buena parte de ellos con el propio Rajoy en la Moncloa. También se mueven los diputados y senadores, conscientes de que pueden perder su escaño.
El plan del presidente pasa por reconducir el debate público; que sea el Gobierno el que cree las noticias y el partido su mejor altavoz. Tal y como avanzó este diario, su equipo le ha preparado un calendario de anuncios potentes, que incluye buenas noticias para los funcionarios y para la clase media en general. La bajada del IVA está en boca de todos, pese a que formalmente Rajoy asegura que no hay tomada ninguna decisión en firme.
"El 80% de una tertulia de La Sexta es sobre corrupción (…) tenemos que conseguir que se hable de lo que estamos haciendo, que forme parte del debate", se defendió desde la dirección nacional. Casado será pieza clave en este sentido, como también Javier Maroto y Andrea Levy, que a ojos de los estrategas del PP "dan bien en cámara" y pueden recuperar voto por el centro.
En todo caso, la primera reunión del Comité -de dos horas y media- fue una mera toma de contacto. Todos tomaron la palabra y los nuevos consensuaron con Rajoy cuáles serán sus cometidos. La función de Fernando Martínez Maillo es decisiva a ojos del presidente, ya que ha de engrasar la maquinaria de cara a las generales, y el ambiente sigue siendo pésimo. También se dedicó mucho tiempo a la conferencia política, que se celebrará los días 10 y 11 de julio en Madrid.
Tres son los bloques con los que trabaja el PP: políticas sociales y empleo, Europa y marca España y reformas estructurales. Si bien, Rajoy quiere recuperar el apoyo ciudadano -principalmente por el centro- gracias a la economía y a una importante "agenda social". "Nos están dejando el centro y la moderación sólo a nosotros", en palabras de Casado, que no desaprovecha cualquier ocasión para asestar un golpe al PSOE y sus "radicales" aliados.
En Bruselas, antes de participar en el Consejo Europeo, un didacta Rajoy confirmó que "algunas decisiones se pueden tomar" en relación a los funcionarios. Todavía fue más claro, toda vez en la víspera el caos informativo del Gobierno se convirtió en la noticia. "Las cosas van un poco mejor" y, si la recaudación lo permite, se devolverá al colectivo la paga extra que le fue retirada en 2012.
"Es un asunto que está en estudio en estos momentos", dijo Rajoy. Desde Hacienda, se admite sin tapujos que llega "el momento de las buenas noticias" para devolver "el sacrificio a los españoles". "Las pensiones están garantizadas en el futuro", quiso aclarar también el presidente, después de las recomendaciones del gobernador del Banco de España. Si bien, recalcó, "el objetivo capital es que haya empleo", y también en este sentido se esperan cifras históricas.
Puesto al Gobierno y al partido a trabajar, Rajoy sigue insistiendo en que no adelantará las elecciones generales, como se lo han reclamado cargos del PP, principalmente de Cataluña. "Se lo he dicho tantas veces que yo creo que ya ni merece la pena, francamente", respondió desde la capital comunitaria.
La próxima reunión del Comité de Dirección será el lunes por la mañana. A sus integrantes, Rajoy les ha pedido que "trabajen, escuchen y se expliquen desde ya". Aunque, por encima de todo, les transmitió una percepción: "optimismo" de cara a las generales