La agenda de los candidatos a la Presidencia de la Comunidad de Madrid es cada día más frenética. El líder madrileño de Ciudadanos, Ignacio Aguado, se deja querer a izquierda y derecha y desde las sedes de los principales partidos, PSOE y PP, tratan de granjearse el apoyo del partido naranja para formar gobierno.
Así, Aguado dejó claras desde el principio algunas de las "líneas rojas" que pone sobre la mesa para dar su apoyo a un gobierno. Líneas rojas muy centradas en lo que ha venido a llamar "la regeneración democrática" y la "lucha contra la corrupción". Los últimos contactos entre el presidente de Ciudadanos Albert Rivera con Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, así como las reuniones entre Ignacio Aguado con Gabilondo y Cristina Cifuentes, parecen acercar las posturas entre socialistas y Ciudadanos.
Tanto es así que fuentes de Ferraz consultadas por Libertad Digital advierten de que Gabilondo comienza a verse ya como próximo presidente de la Comunidad de Madrid después de su reunión este martes por la noche con Ignacio Aguado. Según estas fuentes, el paquete de medidas regeneracionistas de Gabilondo gustó mucho a Aguado y entienden que desde Ciudadanos tendrían muy difícil explicar un apoyo al PP con los constantes casos de corrupción que se conocen del partido de Mariano Rajoy.
Sin embargo, de cumplirse los anhelos de Gabilondo, Aguado estaría pasando por alto una gran cantidad de líneas rojas en caso de acceder al pacto con el PSOE.
Línea roja de las primarias
Una de las condiciones que planteaba Ciudadanos era la de pactar con un partido donde rija la democracia interna y donde las primarias fueran el método de elección de los candidatos. Esta condición parecía alejar a los de Rivera de la formación de Mariano Rajoy, pero también debería hacerlo de Ángel Gabilondo, cuando accedió con Pedro Sánchez a dar un golpe de mano en la formación en Madrid para tumbar al candidato elegido por las bases (Tomás Gómez) e imponer como candidato al hermano del periodista Iñaki Gabilondo.
Línea roja de la corrupción
Ignacio Aguado dijo este mismo martes en Es la tarde de Dieter que las imputaciones de los consejeros en funciones de la Comunidad de Madrid Salvador Victoria y Lucía Figar ponían en serio riesgo su apoyo a Cifuentes, ya que para Ciudadanos supondría un riesgo dar su apoyo ahora y que sigan apareciendo casos de corrupción. Que ni Lucía Figar ni Salvador Victoria estén en la lista de Cifuentes no es excusa para Aguado para pensarse su apoyo a un gobierno madrileño del PP, ya que, explican, representan a un partido.
Sin embargo, no dice Aguado que apoyar un gobierno de Ángel Gabilondo sería apoyar un Gobierno del sucesor de los escándalos del tranvía de Parla, o del partido que ha amparado y protegido a Chaves y Griñán, dos de los nombres más vinculados a los escándalos de corrupción de los ERE en Andalucía y los cursos de formación.
Por otro lado, de ser necesario algún tipo de apoyo de Izquierda Unida en la Comunidad de Madrid, Ciudadanos se vería obligado a entenderse con un partido manchado por la corrupción de Rivas-Vaciamadrid, donde su alcalde, Pedro del Cura, y la familia de Tania Sánchez -antes Izquierda Unida- están imputados por un caso de corrupción en la adjudicación de contratos a la cooperativa del hermano de Tania, Héctor Sánchez.
La lista más votada
Aunque Ciudadanos no ha terminado de hacer un dogma de este principio, a nivel nacional el partido de Rivera sí que se ha mostrado firme partidario de permitir que gobierne en cada territorio la lista más votada. De dar su apoyo al PSOE, abriría la puerta a un gobierno de Gabilondo que no fue, precisamente, el ganador de las elecciones autonómicas.