El PP de Madrid ha iniciado el tramo oficial de la campaña electoral con un acto en los jardines de Cecilio Rodríguez en el Retiro en el que sus dos candidatas estrella –Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes- se han reunido con militantes, simpatizantes y periodistas.
Con música en directo, casetas de comida y un moderado optimismo, los populares se han mostrado -en público y en privado- convencidos de que van a superar unas encuestas que este mismo jueves auguraban al PP sendas victorias en comunidad y ayuntamiento, holgadas respecto de los restantes partidos pero que no aseguran el gobierno en ninguna de las dos instituciones.
Ambas candidatas estaban acompañadas de sus equipos de campaña y se han dirigido a los presentes en sendos discursos en los que han encandilado a un auditorio, obviamente muy predispuesto, y que ya se había calentado con los sones de "Volare", la canción que se ha convertido en el himno oficioso de la campaña popular.
"El pico y pala funciona"
"En dos meses le hemos dado mucho al pico y a la pala y se empiezan a ver los resultados" ha dicho Aguirre asegurando que las dos candidaturas principales, la del ayuntamiento en la que ella misma es número uno y la de la comunidad que encabeza Cifuentes, están remontando y que "cada vez hay más gente que nos dice que nos va a volver a votar".
La candidata a la alcaldía ha presumido de no tener "miedo a la libertad" y sí a los que quieren convertir a los ciudadanos "en súbditos" y ha prometido defender los principios que asegura haber defendido durante su carrera y de los que ya ha presumido durante la campaña: "La libertad, la vida, la propiedad y el imperio de la Ley".
Además, ha alertado de la "alianza de perdedores" que podría configurarse a la izquierda del PP, señalando a prácticamente todos los demás partidos como un "festival de la impostura" en el que todos "se presentan disfrazados para no parecer lo que realmente son: los bolivarianos se disfrazan de socialdemócratas y los socialistas, según el día, de liberales o bolivarianos" mientras que los de Ciudadanos "ni siquiera se atreven a declararse liberales y aparentan ser socialdemócratas".
Frente a esto, Aguirre se presenta como la opción más fiable: "A mí ya me conocéis y me conocen todos los madrileños" y, aunque admite no ser del gusto de todos, -"porque no soy monedita de oro"- asegura que "nadie puede decir que voy a estas elecciones disfrazada de nada".
Aguirre terminó su intervención dando la noticia de la victoria de David Cameron y el Partido Conservador en el Reino Unido que, según las encuestas a pie de urna, habría logrado una victoria rotunda, y pidiendo a todos los presentes que se vuelquen en "una campaña que no será fácil".
"Mucho más que unas elecciones"
Cristina Cifuentes ha hablado en segundo lugar y ha empezado asegurando que las del próximo 24 de mayo "son mucho más que unas elecciones municipales y autonómicas", puesto que en ellas no sólo se va a elegir "el modelo de ciudad y de región" sino también la "ideología política" que regirá los próximos años en España.
La candidata a presidente ha tenido palabras bastante duras para todos sus contendientes, incluyendo a un Ciudadanos al que ha llamado "partido camaleón de cara amable" y al que ha reprochado una "calculada ambigüedad ideológica" que no le impide "querer subir los impuestos a los madrileños. Y no sólo el impuesto de Sucesiones y Donaciones sino el IVA de los productos más básicos".
También ha lanzado un duro ataque a Podemos, "el populismo en estado puro" y "el comunismo disfrazado de socialdemocracia", tildándolos de "auténtica amenaza para el sistema democrático".
"¿Os imagináis lo que sería un Madrid gobernado por alguno de estos partidos? – ha preguntado la exdelegada del Gobierno- O peor, ¿os imagináis lo que sería un Madrid gobernado por varios de ellos en coalición?".
Una eventualidad que Cifuentes se ha comprometido a evitar, si bien para ello ha reconocido que necesita a los militantes madrileños del PP: "Necesitamos vuestro entusiasmo para conseguir la confianza de los madrileños. Solo con vuestro apoyo podremos conseguirlo. ¡Salgamos a ganar!", ha concluido minutos antes de que empezase oficialmente una campaña que ya parece durar meses.