Es lo que se desprende, con toda seguridad, de las decisiones de Mariano Rajoy según El Mundo: no volverán a repetirse las elecciones andaluzas y esto significa que, en caso necesario Juanma Moreno, promoverá la abstención de los 33 diputados populares para facilitar la investidura de Susana Díaz.
Aunque hasta ahora los populares andaluces siguen defendiendo el no a la investidura,si Rajoy descarta la celebración de nuevas elecciones en Andalucía, sólo habrá un camino: abstenerse y apoyar indirectamente la continuidad de lo que el propio PP llama el "régimen andaluz". Rajoy parece convencido de que será la abstención conjunta de Podemos y Ciudadanos (ninguno de ellos puede por sí mismo dado que IU ha dejado claro que su NO es contundente) la que dé el gobierno a Susana Díaz. Pero en otro caso, será el PP quien siente de nuevo a Susana Díaz en el gobierno del palacio de San Telmo.
Como es sabido, Díaz necesita el voto directo de PP, Podemos y/o Ciudadanos para ser proclamada en primera instancia por mayoría absoluta. Esta posibilidad parece empresa imposible. En segunda instancia sólo necesitaría la mayoría simple. Tendría que producirse, si no hay votos directos a favor como parece el caso, 17 abstenciones o ausencias como mínimo para que Susana Díaz fuera proclamada. Siempre que Izquierda Unida vote en su contra. Éstas son las posibilidades:
- Con la abstención completa de todo el grupo del PP (33 escaños) o sólo de 17 de sus miembros.
- Con la abstención conjunta de Ciudadanos y Podemos, porque Podemos tiene 15 escaños y le faltan 2 para lograr los 17 necesarios
- Cualquier otra combinación o componenda que garantice las 17 abstenciones.
Si Izquierda Unida decidiera jugar el partido, entonces habría que añadir la posibilidad de que Podemos más Izquierda Unida pudiera asimismo dar el gobierno a Susana Díaz.
Si en un plazo de dos meses no lo consiguiera, la Cámara deberá disolverse y los comicios se convocarían de nuevo aportando un espectáculo inédito de inestabilidad.
Pero, si como anuncia El Mundo, Mariano Rajoy ya ha decidido, no habrá nuevas elecciones en Andalucía, entre otras cosas porque el PSOE, en una segunda vuelta, podría obtener más votos aún y certificarse con más virulencia el hundimiento del PP andaluz.
No parece que en el PP nacional se tenga en cuenta que abrirle la puerta al régimen del PSOE andaluz para que supere el tiempo que Franco estuvo en el gobierno, va a suponer un serio golpe a la hasta ahora presentación del PP como partido del cambio en Andalucía y un nuevo deterioro electoral en favor de la abstención u otras opciones.
Ayer mismo se anunciaba la negociación, abierta ya, entre Ciudadanos y PSOE andaluz, lo que evita que el PP andaluz tenga, por el momento, que tomar partido en esta compleja encrucijada si bien las filtraciones de la posición de Rajoy no permiten zafarse del todo del quebranto electoral.