El presidente de la Diputación de Valencia, Alfonso Rus, ha afirmado este sábado que continuará "adelante" y ha confesado que se siente "indefenso y víctima de un ataque informativo y político brutal" que se enmarca en la campaña electoral y, por tanto, motivado "por razones políticas".
Rus ha emitido un comunicado ante "las numerosas informaciones" sobre su persona, después de que se hayan divulgado unas grabaciones en las que cuenta dinero junto al exgerente de la empresa pública de la Diputación Imelsa, Marcos Benavent, investigado por un juzgado valenciano por una supuesta trama de corrupción. Benavent grabó durante años sus conversaciones con compañeros del partido y de la diputación y a Alfonso Rus.
Rus insiste en que "he sido elegido presidente provincial por las bases del partido Popular y presidente de la Diputación por el grupo de diputados del PP que decidieron apoyarme. A ellos les debo el cargo y por tanto con ellos continuaré adelante", ha aseverado.
En su escrito, el también presidente provincial del PP de Valencia aclara que su patrimonio personal está "totalmente claro, justificado y declarado de acuerdo a la legalidad".
Además, afirma que las cuentas "saneadas" y la gestión de las instituciones que preside, como el Ayuntamiento de Xátiva y la Diputación de Valencia, están "igualmente auditadas, controladas y respaldadas por los técnicos y funcionarios que tienen esa misión, independientemente de los responsables políticos".
El dirigente provincial asegura que no tiene conocimiento "por conducto oficial", ni en ninguna de las informaciones aparecidas se dice que se encuentre incurso "en ningún proceso judicial en calidad de imputado y ni siquiera como testigo".
"En cualquier caso, si alguien cree que he podido cometer un delito, tendrá que demostrarlo y no sembrar la opinión pública con este burdo montaje que a todos daña", ha concluido el presidente de la Diputación de Valencia.